Los partidos políticos no nos representan y nunca nos han representado. Ningún partido, candidato o funcionario público tiene facultades para decidir por nosotros ni para definir el uso y destino de nuestros territorios ancestrales, afirmaron conjuntamente las autoridades agrarias y tradicionales de los pueblos originarios de la Cuenca que México, instancias que representan a los pueblos originarios ante los tres niveles de gobierno.

En tal carácter, dieron a conocer su Tercera declaración de los pueblos de la Cuenca de México, dirigida a todos los habitantes de Ciudad de México (CDMX), donde enfatizan que durante el proceso electoral ninguno de los candidatos o candidatas a gobernar la capital, ni las fuerzas partidistas que los impulsan, han contemplado una verdadera agenda para los pueblos originarios, no obstante que tenemos la propiedad colectiva sobre más de 50 por ciento del territorio de la entidad.

Los pueblos y comunidades de la Asamblea Autónoma de los Pueblos de la Cuenca de México (AAPCM), organización que no responde a intereses particulares ni forma parte de algún partido político, señalan que ningún candidato se pronunció respecto a los 13 artículos de la Constitución Política de CDMX que lesionan sus derechos territoriales. Ninguno lo hizo contra el Instituto de Planeación Democrática y Prospectiva de CDMX, a pesar de que es el instrumento mediante el cual se arrebatará a los pueblos su derecho legal a determinar sobre el uso y destino de sus tierras.

Los representantes indígenas denuncian que, concluidas las campañas, ningún candidato mostró la intención de caminar con los pueblos originarios para frenar la crisis ambiental, social y política en que está sumergida la ciudad, olvidando que en las tierras comunales de dichos pueblos se encuentran los últimos ecosistemas que hacen posible su viabilidad ambiental.

La AAPCM, cuyo objetivo es la defensa de los territorios ancestrales de los pueblos originarios de la Cuenca de México y de la autonomía y la libre determinación, refiere que varios candidatos realizaron reuniones con supuestos representantes de los pueblos y representantes de organizaciones populares y campesinas, para aparentar cercanía, cuando en realidad han sido jornadas de cacería de votos, donde la verdadera problemática de nuestros pueblos no se aborda.

Los pueblos originarios no podemos esperar nada positivo del gobierno y la clase política. Por ello, adelantan, reforzaremos las organizaciones comunitarias para impedir la destrucción de nuestros territorios y que nuestras tierras se destinen a proyectos viales y megaproyectos de desarrollo urbano que no nos benefician.