Representa casi 70% de todas las extracciones del recurso
Frecuentes y severas sequías impactarán los cultivos, alerta
Miércoles 9 de mayo de 2018, p. 36
De acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), el cultivo en el campo es la principal causa de la escasez de agua. Representa casi 70 por ciento de todas las extracciones de este recurso, y hasta 95 por ciento en algunos países en vías de desarrollo.
No obstante, hay cultivos que tienen poco impacto en la huella hídrica. Por ejemplo, para producir un kilo de lentejas sólo se requieren mil 250 litros de agua, sin embargo, para producir un kilo de carne se necesitan 13 mil litros.
Aparte, Rafael Sánchez Bravo, director del Laboratorio de Tecnologías Hídricas Innovadoras de la Universidad Autónoma Chapingo (Uach), destacó que el requerimiento hídrico para la producción de alimentos en México varía, debido a las prácticas de producción que se utilizan, por lo cual la huella hídrica en México es más elevada, para algunos productos, en comparación con la de los países desarrollados.
Dijo que la solución para disminuir la huella hídrica es enfocar esfuerzos en abatir el desperdicio de alimentos, debido a que actualmente en México este derroche asciende a 10 mil toneladas anualmente (37 por ciento de la producción total).
Dijo que un ejemplo es el ahorro de agua por medio del comercio de arroz de Estados Unidos a México. El contenido de agua virtual que se requiere para cultivar arroz en Estados Unidos es de mil 275 metros cúbicos por tonelada, mientras en México se requieren 2 mil 182, lo cual implica un ahorro de agua virtual de 907 metros cúbicos.
Ante esto llamó a cuidar el agua y no contaminar los cuerpos de agua.
La FAO indicó que se espera que la escasez de agua se intensifique por el cambio climático.
Está previsto un aumento de las temperaturas en todo el mundo entre un rango de 1.6 a 6 grados Celsius, como máximo para 2050. Por cada grado de temperatura a causa del calentamiento global, 7 por ciento de la población mundial verá disminuido 20 por ciento o más de los recursos hídricos renovables.
Alertó que sequías severas más frecuentes y graves están teniendo un impacto en la producción agrícola, mientras el aumento de temperaturas se traduce en una mayor demanda de agua de los cultivos. Además de las mejoras en el uso eficiente del agua y la productividad agrícola, debemos tomar medidas para cosechar y reutilizar el agua dulce e incrementar el uso seguro de aguas residuales
.
Con esto no se evitarán las sequías, pero sí puede ayudar a prevenir que las sequías se conviertan en hambrunas y alteraciones socioeconómicas
y llamó también a reducir las pérdidas y el desperdicio de los alimentos.
Cada año un tercio de la producción mundial de alimentos se pierde o desperdicia, lo que se traduce en un volumen de agua usada en la agricultura totalmente desperdiciada.
Sánchez Bravo expresó que es importante considerar que en cada alimento, producto que se consume, prenda que vestimos, en cada electrodoméstico que encendemos, en cada motor que accionamos, existe un consumo de agua asociado.