La dependencia de México a la importación de gasolinas aumentó en el ultimo año. Mientras en el primer trimestre del año pasado se importaron 6 de cada 10 litros de combustible vendido en las gasolineras del país, entre enero y marzo de este año se trajeron del extranjero 7.5 de cada 10 litros, debido a que disminuyó la producción nacional indican cifras de Petróleos Mexicanos (Pemex).

En su reporte a la Bolsa, Pemex señaló que la caída en la producción obedeció a que en enero y febrero se programó un cierre en las refinerías de Madero y Minatitlán para mantenimiento general así como por problemas en la refinería de Salina Cruz.

Los datos de la ex paraestatal señalan que en el primer trimestre de este año la producción de gasolinas automotrices promedió 192.2 mil barriles diarios, que representaron apenas 24.6 por ciento del total de las ventas internas, las cuales promediaron 782.2 mil barriles diarios.

El resto, 590 mil barriles diarios, que representan 75.4 por ciento del total del consumo nacional, fueron importados.

En contraste, en el primer trimestre del año pasado la producción de gasolina promedió 315.3 mil barriles diarios, que representaron 41 por ciento del consumo total, el cual fue de 771.7 mil barriles diarios. Lo anterior significa que la importación de combustibles en el primer trimestre del año pasado representó 59 por ciento del consumo nacional.

Los datos de Pemex señalan que la producción de gasolinas en el país se ha deteriorado desde la aprobación de la reforma energética. En 2013, la producción de gasolina promedió 437.3 mil barriles diarios, mientras que al año siguiente bajó a 421.6 mil; cerró en 381.4 mil en 2015 y descendió a 325.3 mil barriles diarios en 2016.

En el caso del diésel el volumen de ventas internas promedió 301 mil barriles diarios, de los cuales 113 mil (37.5 por ciento) fueron producidos en el mercado nacional en el primer trimestre.

Las cifras de Petróleos Mexicanos señalan que sigue disminuyendo el consumo en el país de gasolina Premium, mientras el consumo de Magna se mantiene constante.

En los primeros tres meses del año el consumo de Magna promedió 661 mil barriles diarios, un incremento de apenas 4.7 por ciento respecto a los 631 mil que promedió en el primer trimestre de 2017.

El consumo de Premium promedió 120 mil barriles diarios en el primer trimestre, una disminución de 14 por ciento frente a los 140 mil barriles diarios del primer trimestre de 2017.

Pemex espera que para el segundo trimestre del año haya un incremento en el procesamiento de crudo, pues ya se resolvieron los problemas de confiabilidad eléctrica en la refinería de Salina Cruz, que cerró el primer trimestre con una capacidad operativa de 73.8 por ciento.

Aseguró que al finalizar el trimestre la capacidad de destilación primaria en las refinerías de Salina Cruz, Tula, Cadereyta y Salamanca alcanzó 70 por ciento.