La oposición se quejó de no conocer las minutas aprobadas
Buena parte de las propuestas no pasaron por las comisiones
Sábado 28 de abril de 2018, p. 10
El Senado cerró el periodo y la legislatura con la aprobación acelerada de cerca de 100 dictámenes, la mayoría sin discusión y algunas con reclamos de la oposición porque ni siquiera conocían lo votado, ya que fueron reformas que no aparecían en la agenda y se presentaron de última hora.
La madrugada del jueves se pidió incluso a Diva Hadamira Gastélum, senadora del Partido Revolucionario Institucional, explicar al pleno en qué consistían las modificaciones a diversos ordenamientos sobre violencia política hacia las mujeres que la legisladora logró que se discutieran de última hora, al final de la maratónica sesión.
Se le dispensó la primera lectura y se pusieron a votación como modificaciones a las leyes generales de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia y de Instituciones y Procedimientos Electorales, entre otras. Alejandro Encinas pidió que se les informara el contenido de la reforma, que se aprobó con 76 votos a favor.
En la sesión del jueves, que se prolongó hasta la medianoche, se votaron en paquete iniciativas de una misma materia, ocho dictámenes sobre migración, seis de desarrollo social y tres sobre comercio.
Dado que 40 senadores de todas las fuerzas políticas estaban en la reunión de comisiones unidas en la discusión de la minuta que elimina el fuero, el pleno se veía casi vacío y pocos dictámenes fueron discutidos. Buena parte de ellos no pasaron por comisiones.
Se siguió con la práctica de dejar la responsabilidad de elaborar el dictamen a los secretarios técnicos de cada comisión y luego pasarlo a firma de cada integrante. Ello quedó de manifiesto cuando Javier Lozano, presidente de la Comisión de Cultura, presentó la minuta que reforma la Ley Federal del Derecho de Autor, a fin de que los creadores puedan solicitar medidas cautelares para impedir o tratar de prevenir la violación de sus derechos patrimoniales.
Juan Carlos Romero Hicks, de Acción Nacional, advirtió que la Comisión de Estudios Legislativos Segunda ni siquiera se había reunido para discutir el dictamen y denunció que éste se le había pasado a firma esa mañana –del jueves– con fecha de un día anterior.
El presiente del Senado, Ernesto Cordero, le respondió que el dictamen llevaba cinco firmas de integrantes de esa comisión y, por tanto, era válido. Otro panista, Raúl Gracia, exigió que se precisara cuándo y dónde se había reunido Estudios Legislativos Segunda.
Cordero insistió en que la mesa directiva actúa de buena fe
al recibir la documentación que le presentan las comisiones y puso a votación el dictamen, lo que provocó otros reclamos de sus compañeros de bancada.