Al comparecer en el Senado, el alcalde con licencia de Choix, Sinaloa, José Lindolfo Reyes Gutiérrez, dijo que no acató la recomendación de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) de atender a desplazados por la violencia en varias comunidades de ese municipio, porque no hay tal: ni inseguridad ni familias obligadas a dejar sus hogares. Lamentó que el ombudsman, Luis Raúl González Pérez, no estuviera presente en la reunión.

Lo invito de todo corazón a que vaya a mi municipio y hagamos un recorrido juntos, para que sea testigo de cómo están las condiciones en Choix, destacó el munícipe.

La presidenta de la Comisión de Derechos Humanos del Senado, Angélica de la Peña (PRD), también lamentó que ni González Pérez ni nadie de la CNDH hubieran asistido, a pesar de que que se les invitó, ya que Reyes Gutiérrez fue citado a comparecer por no cumplir una recomendación de ese órgano autónomo.

Sólo acudieron cuatro legisladores, entre ellos la priísta Diva Hadamira Gastélum, quien en todo momento defendió a su paisano y aseguró que es falso que impere la delincuencia en Choix. A ello se sumó el legislador sin partido Manuel Cárdenas, quien se puso también de lado de Reyes Gutiérrez e incluso descalificó a la CNDH, a la que acusó de prejuzgar, de no tener idea cuando hace ese tipo de recomendaciones.

En octubre de 2017, la CNDH emitió la recomendación 39/2017 a los alcaldes de Sinaloa de Leyva y Choix, María Beatriz León y José Lindolfo Reyes, respectivamente, por ser omisos en el desplazamiento forzado interno de 2 mil 38 personas.

El recurso resalta que la violencia que padece la entidad por la presencia del crimen organizado fue la principal causante del fenómeno y consideró que hubo violaciones a los derechos humanos de las personas que debieron dejar sus comunidades entre 2012 y 2015.

Reyes Gutiérrez rechazó esos señalamientos. La voz se le quebró y entre sollozos, reclamó: ¡No es justo que aquí en México y en otros lados se nos siga catalogando como municipios violentos! ¡Eso no se vale! Por eso yo me negué rotundamente y se lo puse en el oficio que le mande.