Temer pretende quitarle algunos beneficios que tiene en la cárcel
Miércoles 11 de abril de 2018, p. 28
Curitiba.
El presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva (2003-2011) no puede recibir visitas más de un día por semana, determinaron dos jueces, uno de ellos Sérgio Moro, el que condenó y ordenó el encarcelamiento del ex mandatario, quien cumple una sentencia de 12 años de prisión.
Carolina Lebbos, juez federal del estado de Paraná y responsable de la ejecución penal de Lula, indicó que no hay fundamento para flexibilizar el reglamento general de visitas de la cárcel de la policía federal
.
Horas antes, 10 gobernadores regionales y otros políticos, en su mayoría del Partido de los Trabajadores, llegaron a Curitiba con la intención de visitar al ex líder metalúrgico en la cárcel.
Sin embargo, el juez Moro, a cargo de la operación Lavado Rápido, especificó que el ex presidente sólo recibirá visitas una vez a la semana y se le otorgó como única prerrogativa una sala especial de reclusión, ocho asistentes y un televisor por su calidad de ex gobernante.
El mandatario Michelle Temer evalúa retirar estos beneficios, según voceros de la presidencia.
Fuentes de seguridad de la superintendencia, citados por la prensa, dijeron que se trata de una celda en condiciones precarias y aislada de todo, pues se ubica en el cuarto piso del edificio, donde los elevadores sólo llegan hasta el tercer nivel.
El aislamiento podría provocar al ex gobernante una profunda depresión
, indicaron las fuentes. Desde su ingreso, Lula se ha dedicado a leer y el pasado domingo vio ganar a su equipo de futbol, el Corinthians, la final del campeonato paulista.
El ex dirigente metalúrgico fue sentenciado sin prueba alguna por un cargo de corrupción en el contexto de la operación Lavado Rápido.