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Ante el retiro de Zambotti, asume el liderato en la disciplina

Judoca Edna Carrillo desea mantener el prestigio tricolor sobre el tatami
 
Periódico La Jornada
Domingo 18 de marzo de 2018, p. a15

Ser campeona de América es lo único que le falta a la judoca Edna Carrillo para seguir trazando el camino olímpico a Tokio 2020, cita a la que espera llegar con la experiencia y madurez necesarias, sin apresurarse, cuidarse de lesiones y conservar el liderato que asume entre sus compañeros ante el espacio que dejó Vanessa Zambotti.

Edna tiene siete medallas, una plata y seis bronces en sus participaciones continentales de la disciplina, y este año tiene dos grandes retos, así como los abiertos internacionales y Grand Prix para mejorar su ranking mundial, que la ubica entre las 16 mejores.

La judoca, de 26 años, se encuentra con el equipo mexicano en un campamento en Madrid y desde la capital española refiere que entrena como si fuera el primer día en que debutó en el tatami con la selección nacional, porque su deseo es mantener el prestigio de México en los podios.

Voy en busca de mi primer campeonato (el próximo mes en Costa Rica) y quiero ser monarca, y además volver a conseguir lo más alto del podio en los Juegos Centroamericanos y del Caribe (en Barranquilla), señala la jalisciense, quien ha tenido el privilegio de ser la campeona regional en Mayagüez 2010, aunque en Veracruz 2014 perdió la corona.

Carrillo Torres compite en la división menor de 48 kilogramos y con el retiro de Vanessa Zambotti, quien ha sido la inspiración de generaciones y abrió el sendero para el judo femenil, no siente presión por llevar esa carga emocional; sin embargo, asume el papel, el cual le agrada, pero más que nada me gusta dar un buen ejemplo a mis compañeros. Creo que es la mejor manera de liderar. Ser constante y ofrecer lo mejor de mí.

Las dos judocas son en la rama femenil las únicas del país que tienen medallas en Juegos Panamericanos. Vanessa tuvo tres y fue campeona en Río de Janeiro 2007, en cambio Edna, ganó bronce en Toronto 2015 y eso representa un verdadero honor para la tapatía que, a pesar de sus logros, peleará el lugar de su categoría con dos compañeras más y la que le ponga más corazón será la que represente a México en Barranquilla.