El aumento, para todo empleado estatal
Miércoles 7 de marzo de 2018, p. 29
Nueva York.
Bailando y cantando, miles de maestros de escuelas públicas festejaron el triunfo de la huelga en West Virginia; cientos de estudiantes salieron a las calles de Baltimore para exigir un mayor control de armas, y después de un día de acción nacional, los dreamers insistieron en su sueño por todo el país.
Después de nueve días hábiles, la huelga que cerró las escuelas públicas en los 55 condados de West Virginia culminó con un triunfo en donde el gobierno estatal, controlado por republicanos, aceptó las demandas básicas de un incremento de 5 por ciento en salarios para el magisterio, entre los peores pagados en el país –quienes no habían visto un aumento en cuatro años– y también para todo trabajador público estatal.
¿Quién hizo historia? Nosotros
, coreaban los maestros mientras bailaban en el Capitolio estatal después de encabezar una de las luchas laborales más importantes de los años recientes, en la cual participaron entre 15 y 20 mil maestros, así como personal académico; todos fueron apoyados por aliados, incluyendo estudiantes y el sindicato minero, con su legendaria historia de lucha en ese estado.
Una maestra dijo que esto fue una victoria para los estudiantes también, ya que esto “les demuestra cómo debe funcionar la democracia, que no se trata de hincarse ante nadie (…) recibieron la mejor lección que jamás podrían obtener, aunque estaban fuera de la escuela”.
Otros señalaron que los maestros acababan de ofrecer una lección para los trabajadores de todo el país, que enfrentan una ofensiva derechista contra los derechos sindicales y laborales. Esto es muestra del poder de la acción colectiva, el poder de la huelga, el poder de la solidaridad
, comentó la estratega sindical y analista laboral Jane McAlevey.
Estudiantes en Baltimore: Armas abajo, calificaciones arriba
En otro frente, cientos de estudiantes salieron de sus aulas de escuelas públicas y privadas en Baltimore y marcharon a la alcaldía para exigir un mayor control de armas y la violencia, al grito de: Armas abajo, calificaciones arriba
, reportó el Baltimore Sun. Se acostaron en la calle durante 17 minutos en honor de las 17 víctimas de la matanza en la preparatoria en Parkland, Florida, hace unas semanas, cuyos estudiantes han detonado este nuevo movimiento encabezado por jóvenes. En una pancarta se leía: Estoy perdiendo un día de escuela porque 17 perdieron el resto de sus vidas
.
Los estudiantes de Florida han convocado a la Marcha por nuestras vidas
a escala nacional para el próximo 24 de marzo (https://marchforourlives.com).
Los dreamers siguen en lucha
Otros jóvenes, los conocidos como dreamers, realizaron más de 70 acciones en la capital y por todo el país el lunes denunciando la inacción del Congreso para resolver la anulación ordenada por Trump del programa de legalización temporal, DACA. Junto a cientos de aliados –religiosos, sindicalistas y defensores de derechos civiles– exigieron que el gobierno nos deje de cazar
y enviaron el mensaje, según Cristina Jimenez, de United We Dream, una de las organizaciones nacionales de ese movimiento, para aquellos en el poder de que no nos podrán evadir y que estamos aquí para luchar
.