La coalición Juntos Haremos Historia, integrada por los partidos Morena, del Trabajo (PT) y Encuentro Social (PES) no ha estado exenta de inconformidades internas por la designación de candidatos a cargos de elección popular.

En Puebla, por citar un caso, han surgido quejas por la postulación de abanderados que formaron parte del gobierno de Rafael Moreno Valle, mientras en Guerrero se ha mencionado que petistas podrían retirar 40 municipios y 12 distritos de la coalición parcial por estar en desacuerdo con la forma en que Morena aplicó la equidad de género para designar candidaturas.

Victoriano Wences Real, comisionado del PT para este estado, se ha pronunciado en particular contra la decisión de que recayera en una mujer –la magistrada con licencia Adela Román– la candidatura a la presidencia municipal de Acapulco, cuando en ese partido se pugna por que el abanderado sea el médico Javier Solorio Almazán.

Por otro lado, hace unos días la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación en Puebla rechazó la designación de Guillermo Aréchiga Santamaría como candidato a diputado federal de la coalición, y exigió al PT reconsiderar.

El vocero de la organización, Jorge Cabrera, resaltó entonces que Aréchiga utilizó puestos públicos para golpear compañeros que han alzado la voz en defensa del respeto a los derechos labores y sindicales, y lo acusó de haber operado electoralmente para Rafael Moreno Valle.

Docentes poblanos recordaron que siendo secretario de Gobernación municipal convocó a Rubén Sarabia, Simitrio, líder de la Unión Popular de Vendedores Ambulantes 28 de Octubre, a una reunión y al final de ésta fue detenido.

Militantes de Morena, como Manuel Bravo Guzmán y Pável Lima, en tanto, han pedido a la dirigencia nacional reconsiderar candidaturas, pues –aseguran– fueron excluidos de las listas para presidencias municipales.