Kelly Clements, titular adjunta del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur), comenzó ayer una visita oficial de trabajo por México, Guatemala y Honduras, para evaluar los patrones de desplazamiento en la región.

En ese contexto, el Acnur informó que el año pasado 141 mil 800 ciudadanos del llamado Triángulo Norte de Centroamérica (Guatemala, Honduras y El Salvador) fueron deportados a sus países de origen, y la cifra en los cinco años recientes supera el millón de migrantes devueltos (muchos de ellos expuestos a altos riesgos de violencia).

Durante su visita –que concluirá el 3 de marzo–, la comisionada adjunta se reunirá con las comunidades afectadas por la violencia y la inseguridad, también con refugiados y solicitantes de asilo de América Central y visitará proyectos que promueven oportunidades de integración local para quienes buscan seguridad en México.

El Acnur detalló que además evaluará la protección y las necesidades humanitarias de los solicitantes de asilo, refugiados, desplazados internos, deportados y personas en tránsito.

En México, Guatemala y Honduras, Clements se reunirá con funcionarios de gobierno, socios y representantes del sistema de Naciones Unidas y con representantes de la sociedad civil para evaluar los desafíos y los vacíos existentes para la implementación del Marco Integral Regional para la Protección de los Refugiados.

Su gira de trabajo dio inicio por Tabasco, donde visitó refugios que atienden a solicitantes de asilo, sobre todo centroamericanos, como Colibrí (para menores no acompañados) y Cafemin (con capacidad para 105 personas). Esta es la primera visita oficial de Clements a la región desde que asumió el cargo en julio de 2015.

La representante internacional visitará parte de la ruta principal migratoria en México, y posteriormente viajará a Guatemala para encontrarse con refugiados que se benefician de diversas iniciativas de medios de vida. También se reunirá con voluntarios que administran redes de protección y monitoreo en el país, dio a conocer Acnur.

Al concluir su labor en Guatemala viajará a Honduras, donde discutirá con las personas desplazadas que viven en áreas de alto riesgo para comprender mejor el impacto de la violencia y el desplazamiento forzado en ese país.