Las autoridades no han podido llegar al lugar del accidente
Lunes 19 de febrero de 2018, p. 24
Teherán.
Un avión de la aerolínea iraní Aseman Airlines que despegó de Teherán con destino a la ciudad de Yasuj, provincia de Ispahan, en el suroeste del país, se estrelló este domingo en medio de una tormenta de nieve en una región montañosa con 66 ocupantes que se teme hayan muerto.
Más de 12 horas después del accidente la televisión estatal anunció la suspensión, por falta de luz, de la búsqueda de los restos del biturbohélice ATR-72, si las condiciones climáticas lo permiten se reanudarán labores al amanecer.
Dadas las características de la región todavía no tenemos acceso al lugar del siniestro y por lo tanto no podemos confirmar la muerte de todos los ocupantes de este avión
, afirmó el portavoz de la compañía aérea, Mohamad Tabatabai, a la agencia de noticias Isna.
La aerolínea indicó que en el aparato viajaban 60 pasajeros, entre ellos un niño, y seis miembros de la tripulación.
El avión despegó del aeropuerto de Teherán a las 8 de la mañana rumbo a la ciudad de Yasuj, en la provincia de Ispahan, en el suroeste del país.
El aparato se estrelló en el monte Dena, en las montañas de Zagros, a unos 500 kilometros de Teherán y a menos de 25 kilómetros de su destino, según esta fuente.
El guía supremo iraní, Alí Jamenei, envió sus condolencias a los familiares de las personas que iban a bordo del avión, mientras el presidente Hasan Rohani ordenó al Ministerio de Transportes crear una comisión especial para investigar los motivos del accidente.
Las sanciones impuestas a Irán durante años por Estados Unidos, la Organización de las Naciones Unidas y los países europeos impidieron que las autoridades pudieran adquirir aviones occidentales o piezas de recambio para poner al día la flota civil del país.