Madrid. El gobierno del derechista Mariano Rajoy anunció ayer la expulsión del territorio español del embajador venezolano Mario Isea, quien además fue declarado “persona non grata” y cuenta con 72 horas para abandonar el país. La expulsión sucede en una de las peores crisis bilaterales de años recientes. Con base en el principio de reciprocidad, España decidió responder a la expulsión y declaratoria como persona non grata de su embajador en Venezuela, Jesús Silva Hernández, también acusado de injerencia en cuestiones de política interna del país petrolero el jueves pasado. Madrid respondió con idéntica medida en contra de Mario Isea, informó el vocero del gobierno español, Íñigo Méndez de Vigo, quien además advirtió que España quiere mantener relaciones basadas en la amistad y seguirá trabajando para que eso sea así en el marco de la Unión Europea. El ministro de Asuntos Exteriores español, Alfonso Dastis, sostuvo en Davos, donde asistió al Foro Económico Mundial, que su país responderá con proporcionalidad y reciprocidad a la decisión de Venezuela. Además, rechazó las acusaciones de injerencia del gobierno del presidente Nicolás Maduro.