La Pulga gana duelo a Cristiano y se erige como máximo anotador en clásicos, con 15 goles
Suárez, el argentino y Vidal marcaron para los azulgranas, que son superlíderes con 45 puntos
Zidane aceptó que la derrota duele
, pero no tirarán la toalla porque el Madrid no se rinde
Domingo 24 de diciembre de 2017, p. a13
Madrid.
El Barcelona asestó ayer un golpe extraordinario a la liga española al golear 3-0 al Real Madrid en el Santiago Bernabéu, en un clásico en el que los azulgranas impusieron su personalidad y fortaleza ante un rival que realizó una pésima lectura del encuentro.
Con apenas 17 jornadas disputadas del torneo español, el Barça llegó a 45 puntos y abrió una grieta de 14 unidades sobre los madridistas, que tienen un partido pendiente.
La primera media hora fue pura táctica y nada más. Los dos equipos apostaron por subir mucho la línea de presión y cerrar los espacios.
Cualquier centímetro era oro. Kovacic fue la sorpresa en la alineación del Real Madrid y se pegó a Messi, quien participó muy poco durante los primeros 45 minutos. Es decir, el Barcelona se quedó sin juego.
Falta de inspiración
El conjunto blanco dominó en ese escenario táctico y contó con excelentes versiones de Modric y Cristiano Ronaldo, pero le faltó la inspiración de jugadores como Marcelo o Benzema. Pocos se atrevieron a romper líneas con desmarques y el Barcelona se respaldó en Gerard Piqué.
La primera ocasión de peligro llegó hasta el minuto 30, con un remate de Paulinho que sacó Keylor Navas. La respuesta del Real Madrid llegó en seguida con un remate bajo de Cristiano Ronaldo que rechazó un prodigioso Ter Stegen. Fue entonces cuando despertó el clásico.
Paulinho tuvo otra que volvió a exigir a Navas y en el minuto 42 llegó la oportunidad más clara de la primera parte: Marcelo envió un centro y Benzema cabeceó para que el balón se encontrara con el palo izquierdo de Ter Stegen. El delantero francés no está fino, pero tampoco tiene suerte. La cuestión era ver si la segunda parte comenzaría como terminó la primera mitad o si la táctica volvería a imponerse sobre la emoción y el riesgo.
Y lo que pasó es que el conjunto blanco salió dormido y el Barcelona manejó el encuentro a su antojo ante el progresivo desplome de su rival.
El comienzo del paseo fue el primer gol del Barcelona, que llegó a los 54 minutos. Kovacic hizo pasillo a Rakitic, quien desbordó al área sin oposición. Cedió a la derecha a Sergi Roberto y éste puso el balón para que Luis Suárez marcara a placer.
Siguió el festival azulgrana ante el desconcierto monumental del Real Madrid y a los 63 apareció la sentencia. Navas salvó un remate de Suárez, pero en el rebote Carvajal cometió un error al sacar el balón con la mano. Penal y expulsión del lateral blanco. Y gol de Messi en el lanzamiento, con celebración efusiva. Así, el argentino, se convirtió en el máximo anotador del clásico en este inmueble con 15 goles.
La Liga no está sentenciada, afirma Ernesto Valverde
El Real Madrid estaba dos abajo y con 10 jugadores ante un Barcelona que se sentía un gigante en el Bernabéu. Era dueño de la pelota, del partido y del torneo. Zidane puso en el campo a Marco Asensio y Bale, medida que pareció más que desesperada.
El conjunto merengue propuso orgullo para no salir demasiado dañado, pero fue un esfuerzo baldío. El partido se abrió con oportunidades para los dos equipos y protagonismo de los arqueros.
Y en el descuento Aleix Vidal sentenció la goleada tras una gran jugada de Messi. El clásico fue del Barcelona y probablemente también el título ante un rival mucho más que herido.
Ernesto Valverde, técnico azulgrana, se mostró satisfecho por la goleada, pero negó que la Liga esté ya sentenciada.
Zinedine Zidane, estratega merengue, aceptó que la derrota duele
, pero advirtió que su equipo no va a tirar la toalla. Tenemos una semana y vamos a volver más fuerte, el Madrid no se rinde
, sentenció.