Lima.

La constructora brasileña Odebrecht dijo el sábado que los contratos con las empresas vinculadas con el presidente peruano Pedro Pablo Kuczynski están dentro del ámbito legal, en momentos que el futuro del mandatario pende de un hilo en el Congreso opositor, que busca su destitución por incapacidad moral, por su presunta relación con la trama de corrupción de Odebrecht.

La firma –envuelta en escándalos de corrupción en diversos países en América Latina– aseguró que no hay intención política en un informe que mandó hace unos días al Congreso, en el que detalló pagos por 4.8 millones de dólares a dos consultoras vinculadas con el mandatario por concepto de asesoría.

El Parlamento admitió el viernes el pedido de iniciar el proceso de vacancia presidencial con 93 votos a favor y 17 contra, en un acalorado debate.

La asesoría brindada por las firmas Westfield Capital y First Capital corresponde a servicios prestados efectivamente a empresas de Odebrecht y fueron debidamente pagados y contabilizados oficialmente. Los valores de dichos contratos estaban de acuerdo a las prácticas de mercados a la fecha, dijo Odebrecht en una carta al diario La República que hizo pública a través de Twitter.

La firma negó la acusación de un columnista de ese periódico, que la acusó de dar un golpe de estado, al mandar el informe a una comisión investigadora del Congreso. Y precisó que los servicios de asesoría y estructuración financiera fueron gestionados exclusivamente por el empresario chileno Gerardo Sepúlveda, un amigo y ex socio de Kuczynski.

El pago realizado a Westfield Capital, una empresa de propiedad de Kuczynski, fue por un total de 782 mil 207 dólares, entre 2004 y 2007, incluyendo unos 60 mil dólares en los años en los que Kuczynski fue ministro de Economía del gobierno del ex presidente Alejandro Toledo (2001-2006).

La firma brasileña indicó que compartió el documento con el Congreso por haber una ausencia de indicios de ilegalidad en los contratos con las consultoras.

Odebrecht ya implicó a los ex presidentes Ollanta Humala y Alejandro Toledo, acusados de sobornos. Humala está en prisión preventiva mientras espera un juicio y Toledo –que vive en Estados Unidos– tiene una orden de captura con fines de extradición.

Golpe fujimorista

Cientos de personas marcharon por las calles de Lima este sábado contra lo que llamaron un golpe fujimorista, ante la posibilidad de que el mandatario sea removido.

Perú, te quiero, por eso te defiendo, Que cierren el congreso, afuera los corruptos, gritaban los manifestantes, convocados por colectivos contrarios al partido que lidera la ex candidata presidencial Keiko Fujimori. Para el miércoles está programada otra movilización. Los convocantes aclaran que su posición no es de defensa de Kuczynski, sino de las instituciones que supuestamente están en la mira del fujimorismo, sector que gobernó con mano dura de 1990 a 2000.