Combatir empleo en el sector informal elevaría recaudación, dice
Domingo 17 de diciembre de 2017, p. 17
Antes de generalizar el impuesto al valor agregado (IVA) a los alimentos y medicinas, así como buscar la reducción del impuesto sobre la renta (ISR), se deben considerar otras alternativas para que México no pierda competitividad ante la aplicación de la reforma fiscal en Estados Unidos, consideró el Centro de Investigación en Economía y Negocios (Cien).
Sostuvo que antes de pensar en la disminución del ISR en el país, en respuesta al 21 por ciento de la tasa de impuesto corporativo que aprobó la Cámara de Representantes y el Senado del país vecino del norte, se deben considerar otras medidas antes de modificar la carga fiscal.
La primera de ellas se refiere a una estrategia que combata de forma efectiva el trabajo en el sector informal, pues alrededor de 58 por ciento de la población ocupada en México se encuentra en la economía subterránea.
Señaló que dicha cifra no ha bajado en los años recientes y el Servicio de Administración Tributaria (SAT) calcula que cada año el país deja de percibir 485 mil millones de pesos por la cantidad de plazas informales que no pagan impuestos, lo cual equivale a 83 por ciento de los recursos destinados al gasto de inversión del Presupuesto de Egresos de la Federación 2017.
En ese sentido, sostuvo que un número mayor de personas dentro de la economía formal incrementaría los recursos para el sector público, lo cual evitaría hacer ajustes en el nivel del ISR y la generalización del IVA.
El Centro expuso que es necesario hacer más efectivo y eficiente el gasto de gobierno. Explicó que esto se puede lograr mediante mecanismos de control para el presupuesto, lo cual aseguraría que los recursos realmente se empleen para lo que fueron destinados.
Sugirió que el gasto corriente debe modificarse, de tal forma que no se dupliquen las funciones y realicen desembolsos innecesarios, pues los recursos se pueden dirigir al gasto en infraestructura.
El Cien afirmó que la inversión es una de las variables económicas que son más castigadas cuando la moneda mexicana se deprecia, se incrementa el nivel de precios y se elevan las tasas de interés.
En ese tenor, estimó que es de vital importancia buscar incentivos que favorezcan la inversión productiva nacional, pues mientras en el tercer trimestre de 2015 la tasa de crecimiento de la inversión privada fue de 13.9 por ciento, la cifra registrada en el segundo trimestre de este año fue de sólo uno por ciento.
Concluyó que para hacer frente a los riesgos externos, como la reforma fiscal de Estados Unidos, es necesario detonar la inversión nacional, pues hará un contrapeso.
En días recientes, el Instituto Mexicano de Contadores Públicos (IMCP) reiteró su propuesta de generalizar el IVA a alimentos y medicinas, pero advirtió que nadie quiere asumir el costo político.
Alertó que la reforma fiscal de Estados Unidos puede destapar más competencia internacional y una reducción de tasas en otros países, lo cual va a generar conflictos económicos, tasas deficitarias en aspectos impositivos.