La revisión de la cuenta pública de 2015 que entregó la Auditoría Superior de la Ciudad de México (ASCM) a la Asamblea Legislativa (ALDF) arrojó 2 mil 2 resultados que derivaron en mil 604 recomendaciones, la mayoría concentradas en entidades de la administración central, delegaciones y dependencias, con 508, 470 y 362, respectivamente.

Entre estas últimas, según se desprende del informe de resultados, la Secretaría del Medio Ambiente (Sedema) está entre las que reportaron mayor número de irregularidades, como pagos no autorizados y diferencias en trabajos pagados y los que efectivamente se realizaron.

Por ejemplo, en los trabajos que se realizaron en la segunda sección del Bosque de Chapultepec se encontraron diferencias por 717 mil 900 pesos en suministro e instalación de luminarias; 717 mil 900 en el suministro e instalación de postes, y 359 mil 400 pesos en el acarreo de residuos de demolición.

Otras observaciones del órgano auxiliar de la ALDF a esa dependencia son haber realizado obras en terrenos y vialidades fuera de su jurisdicción en Chapultepec; realizó sin permisos ni autorizaciones el biciestacionamiento masivo La Raza en un terreno patrimonio del Sistema de Transporte Colectivo Metro; fijó garantías por vicios ocultos por plazos menores a las debidas; realizó pagos sin comprobar que correspondieran a compromisos efectivamente devengados y se desentendió de la recepción de obras concluidas.

Autorizó pagos sin aplicar penas convencionales por retraso en la fecha de entrega y deficiencias en el servicio de supervisión, que derivaron en daños y perjuicios, tampoco fueron sancionadas.

Además, en auditorías practicadas al Sistema de Monitoreo Atmosférico se detectó que la Sedema incumplió lo establecido en el Programa Nacional de Monitoreo al no realizar al menos una auditoría de desempeño de los componentes del sistema. En materia de desempeño, se advirtió que no resuelve de manera inmediata las denuncias ambientales; alcanzó las mismas metas de 2014 a pesar de que contó con más recursos humanos y financieros; no contó con información sobre la restauración ecológica en suelo de conservación recuperado; no contó con elementos de medición que permitieran verificar la disminución y control de contaminantes de fuentes fijas, así como tampoco para determinar en forma objetiva el grado de reducción de emisiones contaminantes de vehículos automotores.

En el informe, que obtuvo este diario, pero que por ley la ASCM debió publicar en su portal de Internet tras entregarlo a la ALDF el 15 de julio pasado, la Secretaría de Obras registró también numerosas observaciones, como diferencias en trabajos pagados y ejecutados por 7 millones 455 mil pesos en el suministro y fijación de durmientes; 4 millones 634 mil 400 en nivelación, alineación y compactado de vías; 190 mil 400 pesos en el retiro de balastro; 298 mil 800 pesos en el retiro de durmientes y tampoco aplicó penas convencionales a la empresa supervisora, entre otros.