En 2016 disminuyó el número de ataques y de víctimas
Jueves 20 de julio de 2017, p. 21
Washington.
Estados Unidos colocó de nueva cuenta a Irán a la cabeza de los países del mundo promotores del terrorismo, tras acusar a Teherán de promover la desestabilización en varios países de Medio Oriente y el norte de África mediante el apoyo a grupos armados. En su informe anual sobre terrorismo 2016, difundido este miércoles, el Departamento de Estado resaltó no obstante que los atentados ocurridos el año pasado se redujeron en 9 por ciento en comparación con el año anterior, a pesar de la actividad de grupos como el Estado Islámico (EI).
El documento destacó en particular el papel que jugó la Guardia Revolucionaria y otros actores aliados de Irán para desestabilizar los conflictos militares en Irak, Siria y Yemen
.
Aseguró que Irán continuó reclutando combatientes para unirse a las milicias chiítas afiliadas a Teherán, para participar en conflictos en Siria e Irak.
De acuerdo con el gobierno estadunidense la organización Hezbolá, considerada brazo operativo de Irán, ha continuado desarrollando sus capacidades de ataque a largo plazo y su infraestructura en todo el mundo, .
Fuera de los actores estatales, el reporte atribuyó al EI la responsabilidad por la mayoría de los ataques y las víctimas durante 2016, manteniendo una capacidad letal operativa, a pesar de la pérdida de terreno en Irak y Siria.
Pese a las actividades de Irán y grupos como el EI, Boko Haram y al-Shabab, estos dos últimos limitados a África, el número total de ataques terroristas en 2016 fue de 11 mil 72, una baja de 9 por ciento en comparación con los 11 mil 774 de 2015.
Reporta también una disminución de 13 por ciento en la cifra de muertes provocadas por ataques terroristas, que en 2016 ascendió a 25 mil 600.
Según el documento, los ataques terroristas
y el número de víctimas del terrorismo
disminuyeron a escala mundial en 2016 por segundo año consecutivo.
El informe señaló que el grupo extremista EI volvió a ser la principal amenaza terrorista en 2016 y que Al Qaeda sigue siendo una amenaza resiliente.
El resto del informe criticó las fronteras porosas
y las limitaciones de las fuerzas de seguridad en América Latina para impedir el ingreso al hemisferio a grupos terroristas
extranjeros.
Después de 33 años de estar incluida, Cuba no aparece en la lista.