Miles de automovilistas afectados a diario; tardan hasta una hora en cruzar Cuernavaca
Sustituirán el tubo por uno de menor diámetro
Tenía más de 40 años y no lo cambiaron cuando comenzaron las obras
Vecinos de Palmira advierten que rampas de puente ya están cuarteadas
Jueves 20 de julio de 2017, p. 22
Cuernavaca, Mor.
Al cumplirse una semana de que se abrió un socavón en el Paso Exprés, en el kilómetro 93 de la Autopista del Sol, personal de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) y de las empresas constructoras Aldesem, de Grupo Aldesa, y Epccor, no han podido reparar siquiera la tubería del drenaje que rompieron al ampliar la vialidad de cuatro a 10 carriles.
Tampoco han terminado de sacar toneladas de tierra y pedazos de concreto, ni mucho menos han tapado el boquete de seis metros de profundidad y más de 12 de diámetro, donde el 12 de julio Juan Mena López y su hijo Juan Mena Romero perecieron cuando su vehículo cayó ahí.
El tránsito en la Autopista del Sol es lento, lo que afecta a miles de automovilistas que se dirigen a la Ciudad de México o al puerto de Acapulco, Guerrero, a unos días de que se inicie el periodo vacacional.
Los habitantes de la colonia Chipitlán bautizaron a este punto paso de la muerte
o paso estrés
, pues los automovilistas tardan alrededor de una hora en cruzar Cuernavaca.
El objetivo de la construcción del libramiento, según la SCT y el gobierno de Morelos, encabezado por el perredista Graco Ramírez, era que el cruce por la capital del estado sólo tomara entre 10 y 20 minutos.
En el punto donde se llevan a cabo los trabajos sólo se puede pasar alternadamente por un carril, lo que ocasiona largas filas.
Indiferencia de tres niveles
Los vecinos de Chipitlán comprobaron que desde junio alertaron a la SCT, encabezada por Gerardo Ruiz Esparza; al gobierno de Morelos y al ayuntamiento de Cuernavaca, presidido por Cuauhtémoc Blanco, de los desperfectos que había debajo del Paso Exprés.
Sin embargo, ninguna de las autoridades los atendió y la tierra siguió reblandeciéndose hasta que la cinta de rodamiento del sentido sur-norte se hundió y alrededor de las 5:30 horas del 12 de julio un vehículo con dos ocupantes cayó en la oquedad.
Casi dos horas después, Juan Mena López y su hijo Juan Mena Romero murieron por asfixia y sus cuerpos fueron rescatados después de las 15:30 horas. Según vecinos, el rescate se inició cinco horas después de que el auto cayó al socavón.
Este miércoles, los trabajadores de la SCT y de Aldesem y Epccor continuaron con el desazolve de la barranca Santo Cristo, contigua al Paso Exprés, y con la colocación de un tubo metálico de menor diámetro al que tenía el que rompieron y que no cambiaron cuando comenzaron las obras del libramiento.
Les advertimos que la tubería no iba aguantar tantos carriles, pero no hicieron caso. Además, el tubo de drenaje tiene más de 40 años
, subrayó Catalina Martínez.
Mientras tanto, personal que labora en las obras del Paso Exprés colocaron malla ciclónica en las orillas del puente vehicular que atraviesa dicho libramento para impedir que los peatones caigan desde esa estructura.
El pasado viernes, Omar N, de 28 años de edad, resbaló y cayó del puente, de seis metros de altura; fue trasladado a un hospital y el lunes falleció. La mañana del miércoles, agentes de la Fiscalía General del Estado inspeccionaron el sitió.
Colonos de la unidad habitacional de Palmira criticaron que la única respuesta de las autoridades y las constructoras tras la muerte del joven haya sido colocar malla en las rampas de acceso y descenso del puente, el cual aún no está terminado y ya presenta fisuras.