Itzel Monserrat nació con la mandíbula pegada al cráneo (anquilosis temporomandibular), y a los 20 años, médicos del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (Issste) le diseñaron –por computadora– una prótesis de titanio.

Además, con diversas correcciones faciales y odontológicas, se ha podido incorporar a actividades cotidianas.

Es la segunda prótesis total de mandíbula a la medida que se coloca en el Issste y en el mundo, resaltaron los cirujanos maxilofaciales Laura Pacheco y Jorge Chaurand, ambos del Centro Médico Nacional 20 de Noviembre.

En conferencia de prensa, los especialistas dieron los datos del procedimiento que realizaron con apoyo del software CAD/CAM, de diseño y fabricación por computadora de prótesis personalizadas tridimensionales.

Comentaron que tuvieron varias sesiones de trabajo vía Internet con ingenieros biomédicos de la empresa Bayomed para el diseño de dicha prótesis, y con base en los datos que obtuvieron de imágenes de tomografía de la paciente, realizaron el aparato que requería.

Informaron que la prótesis es de titanio con componentes de polietileno de alto peso molecular, material garantizado para soportar presión por carga hasta de 60 kilos, y dará a la paciente calidad de vida durante los siguientes 20 años. Cumplido ese plazo, se revisarán las condiciones de la prótesis a fin de determinar si la puede conservar o deberá ser remplazada, indicaron.

La doctora Pacheco también mencionó que el costo de la prótesis fue de 500 mil pesos, pero si se hubiera realizado en el sector privado, con las cuotas de cirugías, estudios, terapias y atención en varias áreas médicas de alta especialidad, como las que recibió Itzel, el precio habría sido hasta de 2 millones.

La cirugía se realizó el 16 de octubre de 2016, duró ocho horas y requirió la participación de un equipo multidisciplinario. La especialista detalló que a fin de evitar el contacto con saliva y cualquier riesgo de infección, el abordaje quirúrgico fue por detrás de las orejas, en la base del cráneo y por el frente del cuello para llegar a la mandíbula.

Previo a la operación, Itzel se sometió a tratamientos para acondicionar anatómicamente su rostro y propiciar desarrollo de músculo, a fin de lograr resultados favorables en funcionalidad y estética. El otorrinolaringólogo Rafael Ordóñez se hizo cargo de la cirugía de corrección de deformación facial media y rinoplastia. También se reconstruyeron pómulos con hueso tomado de la cresta ilíaca de la joven.

El médico explicó que además de las deficiencias que tenía la paciente a causa de la anquilosis temporomandibular, tuvo un accidente en motocicleta, lo que le provocó una lesión en el tabique nasal y la obligaba a respirar por la boca todo el tiempo. También se corrigió este problema.

Itzel, a su vez, comentó que a causa de la enfermedad con que nació no podía masticar, morder, juntar los dientes ni cerrar la boca. Ahora, luego de varios meses de terapias de rehabilitación, su apariencia física es de normalidad y ella está feliz.