Kiev.

Portugal ganó por primera vez la final de Eurovisión, una gala celebrada el sábado en Kiev, en la que Salvador Sobral, un joven a la espera de un trasplante de corazón, logró imponer su melancólica balada con toques de jazz, en un concurso acostumbrado a las coreografías y las lentejuelas.

Sobral, un crooner de 27 años, que canta pese a una insuficiencia cardiaca, emocionó a los millones de telespectadores del concurso con su tema Amar pelos dois (Amar por dos).

Es una victoria para la música, para la gente que hace piezas que de verdad quieren decir algo, afirmó el artista, un joven delgado de cabello largo y barba rala que canta mientras se frota las manos. El melancólico tema que interpreta, con ritmo de jazz, fue compuesto por su hermana mayor, la cantante de éxito Luisa Sobral.

El portugués, quien tomó una apuesta arriesgada cantando en su propia lengua y no en inglés, a diferencia de la mayoría de sus adversarios, logró también ganarse al jurado profesional. Tampoco le jugaba en favor el hecho de que el tema no se daba para ninguna coreografía impresionante, pero el encanto de la fragilidad de Sobral, de voz suave y trémula a causa de sus problemas de salud, lograron imponerse en un festival famoso por el gran despliegue de lentejuelas y exuberancia.

Vivimos en un mundo de música desechable, sin ningún contenido. La música no es fuegos artificiales, es sentimiento, afirmó el cantante.

Primera victoria

Cuando somos muy buenos, somos los mejores entre los mejores, celebró el presidente portugués, Marcelo Rebelo de Sousa, citado por la agencia Lusa.

La honestidad sombría y austera de Sobral dio a Portugal su primera victoria desde que entró en el concurso en 1964. Hasta ahora su mejor clasificación era el sexto lugar obtenido en 1996.

Yo no sé si soy un héroe, señaló Sobral, cuyo delicado estado de salud le impidió estar en los ensayos. Creo que el verdadero héroe es Ronaldo, aseguró en referencia al futbolista portugués del Real Madrid. Yo simplemente quería cantar una linda canción, tal como es, en portugués, explicó, en relación a su elección minoritaria entre los concursantes que buscan ganar el favor de los auditorios.

El primer ministro, Antonio Costa, celebró el hecho de que una página de la historia haya sido escrita en portugués.

En total, 26 concursantes participaron en este mediático concurso europeo, que lanzó al estrellato a grupos como los suecos ABBA, y que se ha hecho famoso por sus puestas en escena sorprendentes, criticadas también como de mal gusto, que los espectadores y jurados votan desde toda Europa.