La Secretaría de Gobernación (SG) advirtió de infiltrados en la manifestación de familiares de los 43 normalistas desaparecidos en septiembre de 2014, realizada ayer en las inmediaciones de esta dependencia.

Dijo que ante la ofensiva de encapuchados, quienes aventaron bombas de fabricación casera, la Policía Federal repelió con una emisión de gas lacrimógeno para dispersar al grupo de aproximadamente 40 jóvenes no identificados.

Lo más probable es que haya alguna infiltración (en la protesta) dado que había gente enmascarada, tapada, que estaba aventando un tipo de cohetones bastante fuertes, dijo Lorenzo Gómez, director general adjunto de la Unidad de Gobierno de la SG.

Tras los hechos comentó en entrevista: Ya teníamos conocimiento de que venían de su campamento hacia acá; cuando yo llegué para iniciar el diálogo, había gente ajena, probablemente infiltrada, encapuchados, golpeando las vallas, pintando consignas y de pronto empezaron a agredir con piedras, palos y cohetones.

La Comisión Nacional de Seguridad indicó que 40 personas que integraron grupos ajenos a los familiares, embozados, lanzaron a policías federales petardos y otros objetos como piedras, lo que llevó al repliegue de éstos.

Más tarde, la SG informó que ante la acción tomada por individuos distintos al movimiento de los familiares de los estudiantes desaparecidos, los policías federales utilizaron elementos disuasivos.

A consecuencia de los hechos, dijo, dos policías y un trabajador de la Unidad de Gobierno de la SG resultaron con lesiones leves.

La secretaría dijo que los propios padres de los estudiantes normalistas desaparecidos no pedirán una reunión con funcionarios de Gobernación debido a la presencia de grupos ajenos a su movimiento, dijo la dependencia.