Culiacán, Sin.

La Secretaría de Salud de Sinaloa debe 560 millones de pesos a uno de sus proveedores desde la administración pasada –que encabezó Mario López Valdez– y su presupuesto apenas alcanza para pagar la nómina, afirmó Alfredo Román Messina, titular de la dependencia.

Señaló que la secretaría padece una crisis inédita por el adeudo con la empresa Dimesa, concesionaria de farmacias y proveedora de equipo y medicamentos, el cual aumentó año con año durante el sexenio que terminó en diciembre pasado.

Durante su comparecencia ante diputados de la comisión de salud del Congreso del estado, dijo que los ingresos de 3 mil 700 millones de pesos no serán suficientes para pagar la deuda y la nómina, ni para hacer frente a 180 demandas laborales.

Sobre la situación del Hospital Pediátrico de Sinaloa, que este año se integró a la Secretaría de Salud luego de haber sido administrado por un patronato, dijo que buscarán invertir unos 700 millones de pesos para ampliar su capacidad.

Farmacias vacías

En total, agregó, se prevé una inversión de mil 815 millones 210 mil 369 pesos en hospitales y equipamiento, lo que incluye la construcción de un hospital en Mazatlán, que requerirá de unos 492 millones 454 mil 252 pesos. Los legisladores señalaron que la Secretaría de Salud fue saqueada por la anterior administración.

Román Messina aseguró que el mayor problema es el desabasto, pues al comienzo de la actual administración, en enero, recibieron las farmacias vacías.

Durante la comparecencia, trabajadores del sector salud se manifestaron para exigir la entrega de sus nombramientos de químicos –lo cual les permitiría mejorar sus ingresos y prestaciones– así como la homologación de puestos.