Cuernavaca, Mor.

Teresa Castellanos Ruiz, habitante de Huexca, comunidad indígena de la región oriente de Morelos, presentó ante la Fiscalía General del Estado (FGE), región Cuautla, una denuncia en contra de Lourdes Hernández Paredes, el gobierno estatal y la Comisión Federal Electricidad (CFE) por las amenazas que han recibido ella y sus hijas por encabezar las protestas contra la termoeléctrica instalada en esa localidad, parte del Proyecto Integral Morelos (PIM).

Castellanos Ruiz reveló que después de encabezar una marcha en Huexca, municipio de Yecapixtla, para exigir la cancelación del PIM, el 7 de marzo Hernández Paredes (a quien señalan como defensora de la termoeléctrica a cambio de dádivas del gobierno estatal) pidió al ayudante municipal de esa comunidad, Miguel Ángel Álvarez Aguilar, que le advirtiera que dejara de marchar contra la termoeléctrica porque los del gobierno ya la tienen muy bien ubicada.

Álvarez Aguilar también le dijo que si no me callaba iban a balacear mi casa, a desaparecer a mis hijas y a prostituirlas.

En entrevista, señaló que inicialmente no hizo caso de las amenazas, pero al acudir a diversos foros de derechos humanos en la Ciudad de México, Morelos y otros estados, se enteró de que varios activistas que defendían sus tierras y recursos naturales han sido asesinados.

Por ello acudió al Ministerio Público, donde advirtió que si algo le sucede a ella o a sus hijas la responsabilidad recaerá sobre Lourdes Hernández y las instituciones referidas, que por la fuerza impulsan el PIM.

Presenté la denuncia el pasado 21 de abril. Es lamentable que por esta termoeléctrica que tanto daño nos empieza a causar nos peleemos los vecinos del pueblo, subrayó Teresa Castellanos.

Entre las demandas que plantearon en la marcha del 7 de marzo, en la que participaron principalmente mujeres, niñas y niños, destaca parar el desvío de agua de la comunidad a Cuautla, donde se encuentra la termoeléctrica.

La activista aseveró que la CFE roba el agua porque los ejidatarios de Ayala y Cuautla mantienen desde agosto pasado un plantón en San Pedro Apatlaco. Así han evitado que concluyan el acueducto y se lleven el caudal del río Cuautla, con el cual riegan sus cultivos.