Si bien los mexicanos Victoria Mata y Jorge Íñigo sufrieron caídas, ella en el aterrizaje del salto y él en la rutina de piso, ambos se mostraron orgullosos de su participación en el Abierto Mexicano de Gimnasia 2016, que se inició ayer en la Sala de Armas de la Magdalena Mixihuca con tribunas vacías.

Los dos lucieron seguros aun con la novatez que exhibieron en el denominado Campeonato Internacional de Gimnasia Artística, concurso sin valor para la clasificación mundial, aunque avalado por la federación internacional de la disciplina.

Es la experiencia la que aprecian los mexicanos que en esta sexta edición del evento comparten con representantes de Japón, Brasil, España y Colombia.

Sin embargo, el torneo lo engalanan medallistas mundiales y olímpicos encabezados por los rumanos Catalina Ponor y Marian Dragulescu, además de Oksana Chusovitina, única gimnasta del mundo que ha participado en siete Juegos Olímpicos y una de las dos que han competido con tres equipos nacionales distintos: la extinta URSS, Alemania y su natal Uzbekistán.

Este sábado continúa la competencia en barras varonil y barras asimétricas femenil.