Martes 1º de noviembre de 2016, p. 11
Tijuana, BC.
El gobierno de Baja California trata de invisibilizar el fenómeno migratorio en la frontera de México con Estados Unidos, donde en la actualidad coexisten mexicanos desplazados por la violencia, que pretenden laborar en el país vecino y más que han sido expulsados de esa nación, así como centroamericanos y personas oriundas de otros continentes, aseguró Esmeralda Márquez Siu, coordinadora de la Coalición Prodefensa del Migrante.
Advirtió que es urgente construir un programa especial en el estado para proteger a quienes aspiran a residir en Estados Unidos, pues por su alta vulnerabilidad los migrantes pueden ser presa fácil de bandas delictivas y de abusos como discriminación y xenofobia.
Informó que, como cada noviembre, grupos de apoyo afiliados a la coalición recordarán este miércoles a las miles de personas muertas en su intento por cruzar a Estados Unidos, con una misa en el Centro de Atención al Migrante en Tijuana.
La situación es lamentable, consideró, pues en los años recientes se han incrementado la indiferencia y la violencia y los migrantes son víctimas de extorsión y secuestro. Además, recientemente aumentó el número de quienes buscan ingresar a Estados Unidos por cuestiones humanitarias o de asilo.
Es muy lamentable que las instituciones gubernamentales de Baja California continúen con el doble discurso tendiente a invisibilizar el fenómeno, con el principal argumento de que todo está controlado, cuando la realidad salta a la vista y la presencia de estos grandes flujos de migrantes se ha vuelto una cotidianidad, mayormente en Tijuana y Mexicali
, señaló Márquez.