El próximo jueves primero de septiembre agentes de la Policía Federal Ministerial, dependientes de la Procuraduría General de la República (PGR), deberán presentar al juzgado sexto de distrito de procesos penales federales en el Reclusorio Oriente al líder del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), Juan Díaz de la Torre, informaron fuentes del Poder Judicial Federal.

Durante dos años, el líder sindical de los maestros ha evitado comparecer como testigo en el juicio penal que enfrenta Elba Esther Gordillo por lavado de dinero y delincuencia organizada, pese a diversos citatorios que la autoridad judicial emitió para él.

Desde hace un mes, Alejandro Caballero Vértiz, juez sexto de distrito en procesos penales federales, instruyó a la Policía Federal Ministerial a localizar y presentar ‘‘con el uso de la fuerza pública’’ al secretario general del SNTE, el primero de septiembre a las 12 horas en las instalaciones del juzgado.

La última oportunidad que tuvo Díaz de la Torre para presentarse a esa diligencia sin el uso de la fuerza pública ocurrió el pasado 15 de junio, cuando sin causa justificada y sin previo aviso el líder gremial incumplió el citatorio.

Los abogados de la maestra Gordillo han buscado desde hace dos años la comparecencia del líder sindical para interrogarlo sobre los manejos financieros del SNTE, pero el testigo ha litigado en los tribunales para evitar la diligencia.

Es probable que en las próximas horas previas a la comparecencia del jueves de esta semana, los abogados de Díaz de la Torre pueden intentar obtener una suspensión provisional en vía de amparo para impedir que los agentes de la Policía Ministerial Federal lo detengan y trasladen al juzgado, aunque el juez de amparo puede negar dicha suspensión. Por ahora sigue en pie la instrucción del juez Caballero para que los agentes de la PGR lo presenten.

Díaz de la Torre es una de las personas que tenían el poder de autorizar las transferencias de dinero de las cuentas del SNTE, desde los tiempos en que Gordillo era la dirigente. El líder del sindicato era el titular de una de las rúbricas autorizadas para efectuar los movimientos bancarios. Los otros eran Rafael Ochoa Guzmán, Francisco Arriola Urbina y José Ángel Ibáñez Montes.