Primera vez en la historia de los juegos que un país gana oro en hombres y mujeres
El etiope Feyisa Lilesa, medalla de plata, protesta por la represión oficial contra la etnia Oromo
Lunes 22 de agosto de 2016, p. 6
Río de Janeiro.
El keniano Eliud Kipchoge, ganó el maratón de Río 2016, que completó el dominio de su país en la disciplina tras el triunfo de su compatriota Jemima Sumgong en mujeres. Por primera vez en la historia olímpica los ganadores de las pruebas femenina y masculina son del mismo país.
Los mexicanos Daniel Vargas y Ricardo Ramos concluyeron la prueba en los sitios 54 y 120. El primero llegó a la meta 10:07 minutos más tarde que Kipchoge, mientras que Ramos demoró 21:36 minutos en cruzar la línea.
En una exhibición de fuerza, Kipchoge se impuso con un tiempo de 2h08:44, precediendo en más de un minuto al etíope Feyisa Lilesa (2h09:54), que ganó la plata, y al estadunidense Galen Rupp (2h10:05), bronce.
Bajo la lluvia, con salida y llegada en el Sambódromo de Río, cerca del Santo Cristo, Kipchoge se dio un paseo.
El keniano, de 31 años, lanzó un ataque en el kilómetro 30, cuando una decena de corredores iba en cabeza, su impulso jaló a varios maratonistas, los tres que ganaron las medallas y el etíope Lemi Berhanu.
Kipchoge lanzó otro ataque demoledor poco antes del kilómetro 35, dejando atrás primero a Rupp y pocos metros después a Lilesa. El keniano inició una carrera en solitario a ritmo infernal.
La ruta estaba un poco resbaladiza debido a la lluvia. Estoy muy feliz con la plata ya que fue una carrera muy dura
, dijo el etíope Lilesa, quien realizó una protesta política al cruzar la meta, al alzar los brazos como si estuvieran esposados en defensa de su etnia Oromo, cuyas protestas fueron reprimidas por el gobierno.
Desde hace nueve meses un millar de personas han resultado muertas
, dijo Lilesa en rueda de prensa. Tengo familiares en prisión. En mi país si hablas sobre democracia te matan. Si vuelvo a Etiopía tal vez me maten... Quizá tenga que ir a otro país
, añadió.
Uno de los atletas más ovacionados fue el iraní Mohammadjafar Moradi, quien llegó tan exhausto que apenas conseguía avanzar los metros finales. Tras caerse, se levantó y caminó tambaleándose hasta la meta, terminó en el puesto 129.
El maratón brindó una imagen de deportividad con el argentino Federico Bruno (137) y el paraguayo Derlys Ayala (136), que fueron de los últimos en cruzar la meta, pero tras ayudarse para no abandonar. Con muchos calambres y obligado a hacer pequeñas pausas, Bruno estuvo a punto de abandonar, pero resistió.