María Espinoza, la máxima deportista mexicana con tres preseas consecutivas
Seis seleccionados terminaron en cuarto lugar
Hubo atletas con uniformes parchados
Lunes 22 de agosto de 2016, p. 5
México cumplió con cinco medallas, tres platas y dos bronces, en los Juegos Olímpicos de Río, que fueron un respiro de alivio para la delegación nacional, aunque había expectativas de superar las siete preseas de Londres 2012 (1-3-3).
Sin duda, la justa brasileña significó para María del Rosario Espinoza la cereza del pastel y cumplió con su palabra: se convirtió en la máxima representante de la rama femenil del deporte mexicano y del taekwondo del orbe al ganar tres medallas olímpicas consecutivas: al oro de Pekín 2008 y al bronce de Londres 2012 sumó la plata de Río 2016.
La representante del Ejército Mexicano, de 28 años, aún no decide si continuará el ciclo para Tokio 2020; eso dependerá de cómo responda su cuerpo y la llegada de nuevas rivales que la superan en altura y son más jóvenes que ella en la división de más de 67 kilogramos.
Raudo andar en la marcha
A dos segundos estuvo Guadalupe González de alcanzar lo más alto del podio, pero la marchista mexiquense consiguió lo que anhelaba: una presea olímpica. Trabajó menos de cuatro años para ser la subcampeona en los 20 kilómetros, detrás de la china Hong Liu, que llegó a Río marcada por el dopaje.
En poco tiempo y con recursos que se le negaban –ni para los pasajes tenían, dijo su entrenador Juan Hernández–, a pesar de ser campeona panamericana en Toronto 2015 y en la Copa del Mundo (por la descalificación de Hong Liu hace tres meses en Roma), Lupita ya tiene su nombre con letras doradas en la historia nacional.
El destino no quiso que fuera pugilista, prueba con la que deseaba estar en una justa olímpica; luego pasó por las pruebas de velocidad y semifondo, pero se lastimó la rodilla, aunque la integrante de la Marina insistía en practicar deporte.
González, de 27 años, es la primera subcampeona olímpica en una disciplina en la que solamente los marchistas varones figuraban con 10 metales, y se unió al nombre de Ana Guevara, medallista de plata en Atenas 2004, que era el referente del atletismo femenil en 400 metros, para aportar la undécima presea al deporte de pista y campo.
El clavadista Germán Sánchez, con una lesión en el hombro que no ha superado, salvó a su deporte con la presea de plata en plataforma de 10 metros individual. En sincronizados, con Iván García, no pudo defender el subcampeonato de Londres 2012.
El jalisciense, quien compitió en nombre de las fuerzas armadas, no era el favorito porque esa etiqueta la tenía Iván, pero Germán no falló sus clavados y defendió con honor su disciplina para no regresar de Brasil con las manos vacías.
Tras una semana de incertidumbre porque no se daban los resultados, lo cual generó críticas, el boxeador Misael Rodríguez dio la primera presea con un bronce (75 kilogramos) y la frase “boteadas saben mejor” para superar un ayuno de 16 años en que su deporte no figuraba en el podio.
El chihuahuense y sus compañeros salieron a las calles para buscar el apoyo económico que se le negó a su federación, acusada de malos manejos por Alfredo Castillo, director general de la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (Conade), para ir al Mundial de Qatar 2015 y los preolímpicos.
Lo que fue una historia de chantaje y manipuleo
, defendió en ese entonces Castillo, fue un tema de interés en las redes sociales, que se acrecentó con una lluvia de críticas tras la exhibición en fotos del titular de la Conade con su acompañante
, luciendo ambos el traje de gala con el que desfiló parte de la delegación en la ceremonia de inauguración, aunque algunos seleccionados carecieron de lo más elemental y compitieron con uniformes parchados.
En el penúltimo día de la justa, ya con la medalla de Germán y la que tenía asegurada María del Rosario, vino la más sorpresiva, con el militar Ismael Hernández, quien ganó bronce, la primera presea en la historia del pentatlón moderno para México.
Después de ganar el título en Londres, el futbol decepcionó en la cita brasileña. El partido clave fue ante Alemania, rival al que se pudo vencer; sin embargo, al equipo dirigido por Raúl Potro Gutiérrez le faltó mayor decisión y control de juego, a la postre el empate (2-2) fue insuficiente y quedó eliminado en la fase de grupos al perder ante Corea del Sur.
El Tri goleó a Fiji, pero desperdició el primer tiempo y la mala suerte se hizo presente con las fracturas de Oribe Peralta y Rodolfo Pizarro. Varios jugadores quedaron a deber, especialmente los refuerzos Alfredo Talavera y Jorge Torres Nilo, así como algunos juveniles, con Hirving Lozano a la cabeza. Aunado a ello, los clubes no dieron el apoyo habitual.
Los que acariciaron bronces
Seis deportistas se quedaron en la antesala del podio con cuartos lugares: unos conocidos y otros inesperados.
La clavadista Paola Espinosa, doble medallista olímpica en sincronizados (con Alejandra Orozco), buscaba por tercera vez el metal en la plataforma individual. Accedió con dificultades a la final, en la que remontó desde el último lugar para terminar cuarta, con 12 puntos de diferencia de la canadiense Meaghan Benfeito, quien se adjudicó el bronce.
Diego del Real acaparó la atención al llegar a una final a la que nadie había estado en el lanzamiento de martillo, al igual que Alberto Álvarez, quien terminó noveno en el salto triple. El atletismo tiene futuro con jóvenes que demostraron que con el apoyo requerido pueden llegar más alto.
También la arquera Alejandra Valencia, la tiradora Alejandra Zavala, los taekwondoínes Itzel Manjarrez y Carlos Navarro, y el pesista Bredni Roque, quien compitió con uniforme parchado y había concluido quinto, pero luego ascendió al cuarto sitio, por el dopaje del medallista de bronce (Izzat Artykov, de Kirguistán).
En el top 10 quedaron los clavadistas Rommel Pacheco (5 y 7, sincronizados e individual), Jahir Ocampo (5 sincronizados), Paola y Alejandra (6), Iván García (10).
Asimismo, en halterofilia Eva Gurrola (5), Patricia Domínguez (8) y Alejandra Garza (9), el remero Juan Carlos Cabrera (8), los volibolistas de playa Juan Virgen y Lombardo Ontiveros (9), así como la triatleta Claudia Rivas (9).
Por equipos, destacaron las arqueras Aída Román, Alejandra Valencia y Karla Hinojosa (5) y las sablistas Julieta Toledo, Úrsula González, Nataly Michel y Tanya Arrayales (7).
El dueto de nado sincronizado de Nuria Diosdado y Karem Achach avanzó a finales y concluyó en el puesto 11, misma posición de la pentatleta Tamara Vega y la velerista Demita Vega.
Los resultados para una delegación de 125 integrantes pudieron ser mejores, pero la confrontación entre Castillo, Carlos Padilla, presidente del Comité Olímpico Mexicano (COM), y algunas federaciones, influyó negativamente en los competidores.
Al concluir los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro, el presidente Enrique Peña Nieto agradeció la participación de la delegación mexicana. En Twitter escribió: “Todos nuestros deportistas olímpicos son un orgullo para @Mexico. Felicidades por competir en #Rio2016 y dar su mejor esfuerzo”.