Washington.

Estados Unidos desplegó por vez primera cazas de combate en las inmediaciones de una base aérea siria para obligar a las aeronaves a abandonar sus posiciones y proteger así a las fuerzas estadunidenses que combaten al yihadista Estado Islámico (EI) junto con la milicia kurda en el noroeste de del país.

Los F-22 estadunidenses se situaron el viernes a menos de dos kilómetros de dos cazabombarderos sirios, informó el Pentágono, un día después de que la aviación de Siria realizó ataques aéreos contra una posición de la milicia kurda en la ciudad de Hasaka, lo cual forzó a los cuerpos de operaciones especiales de Estados Unidos a alejarse del área.

Tras la ofensiva de las fuerzas sirias el Pentágono aumentó el control aéreo en la zona. Esto se hizo como medida para proteger a la coalición, dijo el capitán Jeff Davis, portavoz del Pentágono.

Advirtió: El régimen sirio debe tener cuidado en no hacer algo que pueda poner en peligro a las fuerzas de la coalición, las cuales asesoran a los kurdos. Dejamos claro que la fuerza aérea de Estados Unidos defenderá a las tropas sobre el terreno si son amenazadas, agregó.

A pesar de la advertencia del Pentágono –que alegó su derecho inherente a la autodefensa–, Damasco envió este sábado más aviones de combate a sobrevolar el área, constató el opositor Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH).

En Alepo, el hermano de Omran, el niño sirio de cinco años cuya imagen tras un bombardeo aéreo en la asediada ciudad dio la vuelta al mundo, falleció este sábado en un hospital a causa de heridas en el estómago durante la ofensiva de la anoche del miércoles.

El niño, de 10 años, sufrió una hemorragia interna y daños en los órganos, informaron los médicos. El OSDH dijo que más de 300 civiles han fallecido en tres semanas de combates entre el régimen y los rebeldes por el control de Alepo.

Aviones rusos y sirios han intensificado sus ataques aéreos en el este de la ciudad, controlado por los rebeldes, desde que los insurgentes lograron romper el cerco el mes pasado.

El Fondo de Naciones Unidas para la Infancia llamó a poner fin a las condiciones horribles en que viven unos 100 mil niños en Alepo. Padecen cosas que ninguno debe sufrir o ver, expresó el director ejecutivo del organismo, Anthony Lake. Los niños de la edad de Omran en Siria sólo conocen el horror de esta guerra librada por los adultos, destacó.