El país se podría ahorrar más de 2 mil 400 millones de dólares si realmente se promoviera la lactancia materna, porque se evitarían enfermedades como gastroenteritis, obesidad y diabetes, advierte un estudio del Instituto Nacional de Salud Pública (INSP).

La promoción efectiva de esta práctica debe considerar, entre otras acciones, el alojamiento de la madre con el recién nacido en los hospitales, la lactancia en la primera hora de vida del bebé y evitar la intervención de la industria de fórmulas lácteas, señalaron especialistas que anunciaron la creación del Comité Técnico-Ciudadano de Amamantamiento.

En conferencia de prensa comentaron que el comité impulsará medidas como las mencionadas y solicitarán a las autoridades información sobre el monto de los recursos disponibles para mejorar la alimentación de los bebés con leche materna.

En ese acto, Julieta Ponce, directora del Centro de Orientación Alimentaria, afirmó que la estrategia del gobierno federal carece de medidas innovadoras, y son las mismas que hasta ahora no han tenido el resultado esperado. De ahí los bajos índices de lactancia en el país.

Como parte de las actividades de la Semana Mundial de la Lactancia Materna, la Alianza por la Salud Alimentaria resaltó que México cuenta con la mejor legislación para promover esta práctica, pero en la realidad esto queda sólo en el papel, subrayó.

Ponce comentó que si las autoridades de salud han demostrado tener compromiso para impulsar la lactancia materna, todavía falta identificar las verdaderas limitantes para cumplir la ley vigente.

Fórmulas lácteas, con demasiada azúcar

Por su parte, El Poder del Consumidor presentó los resultados del análisis que efectuó a las etiquetas de nueve productos sucedáneos de leche materna. Encontró que en promedio contienen 41 por ciento de azúcar, lo que contraviene la norma oficial mexicana (NOM) 043 de orientación alimentaria, la cual recomienda no añadir azúcar ni sodio a los alimentos para bebés.

De su lado, Mikel Arriola, director del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), informó que en los hospitales del organismo se redujo el uso de fórmulas lácteas en 37.5 por ciento, al pasar de 3.71 millones de unidades compradas en 2012 a 2.32 millones en 2016.

Al firmar un convenio de colaboración con el Fondo para la Infancia de Naciones Unidas (Unicef) para promover la lactancia materna, el funcionario resaltó que el instituto que dirige frenó la desmedida comercialización de sucedáneos de leche materna que se daba en el pasado, en beneficio de la salud infantil.

Las fórmulas de seguimiento (indicadas a partir de los seis meses de vida) también se redujeron en 14.5 por ciento: de 4.96 millones de unidades pasaron a 4.24 millones en el mismo periodo.