Sábado 23 de julio de 2016, p. 33
Luego del desencuentro entre el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) y el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) por la metodología utilizada para medir la pobreza, el secretario ejecutivo del primero, Gonzalo Hernández Licona, destacó en redes sociales que la ventaja de tener pesos y contrapesos institucionales en medición permite corregir errores y salir fortalecidos
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En entrevista radiofónica agregó que si vamos a mejorar (la medición) del ingreso, debemos hacerlo de forma más clara y para ello hacer las comparaciones pertinentes
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Señaló que “desde hace días trabajamos con el Inegi y lo que planteamos es que esto que no hizo –probar y transparentar la nueva metodología antes de sustituir el anterior esquema– lo hagamos en la medición de 2016, que va a empezar muy pronto”.
El objetivo, indicó, es que el Inegi trate de tener la forma de medir el ingreso de 2014 y comparar lo obtenido en 2016 y 2012, y buscar formas alternativas
de estimación, pues –reconoció– las metodologías deben mejorarse.
Si queremos tener metodologías más claras, hagamos lo que no se hizo en 2015
, insistió tras reconocer el trabajo que realiza el instituto en la elaboración de datos estadísticos en distintos campos.