Alteraron facturas y certificados ambientales, coludidos con empresas de EU: expertos
Introducción de esas unidades al país subió 15% este año; piden a Peña no ceder en controles
Martes 19 de julio de 2016, p. 17
Entre 2015 y el primer trimestre de este año los importadores de autos usados de Estados Unidos evadieron alrededor de 491 millones y medio de pesos en impuestos al Servicio de Administración Tributaria (SAT), por alteración de facturas y certificados ambientales, según cálculos de la industria automotriz.
En conferencia de prensa, Guillermo Rosales, director ejecuti- vo de la Asociación Nacional de Distribuidores de Automotores (Amda), dijo que los dirigentes de comerciantes de vehículos usados de la frontera norte del país están actuando en colusión con empresas establecidas en Estados Unidos, a las cuales se les envían por correo electrónico datos de los autos y mediante un pago éstas emiten certificados ambientales y envían facturas para acreditar el valor de las unidades, pero con un precio hasta 50 por ciento por debajo del valor real, por lo que los importadores disminuyen el pago de impuestos.
Ante el incremento de 15 por ciento en la introducción de vehículos usados desde Estados Unidos durante el primer trimestre del año, las asociaciones representantes del sector automotor demandaron al gobierno de Enrique Peña Nieto no ceder a las presiones violentas
que promueven dirigentes de comerciantes de vehículos usados para dar marcha atrás a los controles de importación.
Eduardo Solís, presidente de la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (Amia), dijo que el sector automotor no se opone a la importación de vehículos usados, que está regulada por un decreto.
Explicó que para internar un vehículo al país se debe pagar 10 por ciento de arancel y 16 por ciento de impuesto al valor agregado (IVA); si el vehículo es para la frontera el arancel es de uno por ciento, pero no se debe permitir que haya importaciones sin cumplir con los requisitos legales.
Aseguró que debe ser interés del gobierno federal proteger una industria cuyos sueldos son hasta dos veces mayores que el salario que se paga en las manufacturas.
Guillermo Prieto Treviño, presidente de la Amda, dijo que el decreto para regular la importación de autos usados ha tenido un efecto positivo en las ventas de unidades nuevas, las cuales tuvieron un incremento cercano a 20 por ciento en lo que va del año. Estimó que para el cierre de 2016 se comercialicen en el país mas de un millón 500 mil unidades.
Recordó que de octubre de 2005 –cuando se abrió la frontera– a 2015 se vendieron 10.7 millones de automóviles nuevos, pero se introdujeron 7.5 millones de vehículos usados. Es decir, 75 por ciento de las ventas estaban correspondidas por un auto que entraba por la frontera
.
Miguel Elizalde, presidente de la Asociación Nacional de Productores de Autobuses, Camiones y Tractocamiones (Anpact), dijo que la misma situación afecta a camiones y autobuses, pues de 2013 a 2015 habían caído las cifras de vehículos pesados usados, pero en 2016 se ha revertido esta tendencia, pues se ha incrementado 7 por ciento la importación de unidades pesadas.
En la Ciudad de México se están resintiendo efectos ambientales por la importación de chatarra. La solución es reducir la edad promedio de la flota y la importación de vehículos de desecho no ayuda en nada
, consideró.
El presidente de la Industria Nacional de Autopartes (Ina), Oscar Albin, dijo que dicha industria también se afecta, pues la introducción de autos chatarras inunda el mercado de autopartes usadas.
Prieto Treviño dijo que México tiene la capacidad de vender dos millones de autos al año pero la importación anual no debe ser mayor de 150 o 200 mil.
Según la Asociación Nacional de Distribuidores de Automotores (Amda) a mayo de este año la importación de autos usados llegó a 75 mil 398 unidades, una décima parte más frente a los 68 mil 437 introducidos el año pasado.