Tras quejarse por el toqueteo de su busto, la mujer –identificada como V2– recibió del marino un golpe certero en la nariz que le provocó un prolongado sangrado. Le cambiaron la venda de los ojos y le pidieron que se bajara el pantalón; su negativa le costó recibir más cachetadas; eso fue el principio de más de 25 horas de agresiones, amenazas y golpes, tras ser detenida la noche del 28 de noviembre de 2012.

Lo anterior según la recomendación 20/2016 emitida por la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), enviada al secretario de Marina, Vidal Francisco Soberón Sanz, por la detención arbitraria, retención y cateos ilegales, además de tratos crueles e inhumanos, en contra dos mujeres y un menor de edad, en Coatzacoalcos, Veracruz.

En los primeros cinco meses del año, la Secretaría de Marina suma 118 quejas por diversas violaciones a derechos humanos. En 2015 la cifra de denuncias casi llegó a 400.

De acuerdo con la investigación, los tres casos sucedieron en lugares y momentos distintos, entre 27 y 29 de noviembre de 2012. La primera mujer fue sustraída de su domicilio por unos 30 marinos encapuchados con armas largas sin orden de aprehensión; la segunda fue asegurada por 10 elementos durante una reunión en la casa de otra persona.

Ambas fueron trasladadas en camionetas y llevadas a un lugar donde fueron objeto de diversos tratos crueles ocasionados por los elementos que las detuvieron.

Ambas fueron remitidas al penal federal de Tepic, y tras 22 y 60 días de reclusión, respectivamente, obtuvieron su libertad bajo caución para ser absueltas dos años después por delitos contra la salud y portación de armas de uso exclusivo de las fuerzas armadas.

El menor de edad fue detenido por marinos sin que avisaran a sus padres; sus familiares lo ubicaron hasta el 30 de noviembre de 2012l en el Ministerio Público.