Playa del Carmen, QR.

Miriam Carbajal y Adela Alvarado comparten algo en común: a ambas les arrebataron algo importante en sus vidas. A la primera, la libertad; a la segunda, una de sus hijas. Esa realidad de violencia, impunidad y desesperanza es retratada por la cineasta Tatiana Huezo en el documental Tempestad.

La valentía de sus protagonistas para exponer sus casos fue aplaudida por el público que asistió a la función de esta película en el Festival de Cine de la Riviera Maya (RMFF, por sus siglas en inglés).

En la proyección estuvo presente Miriam Carbajal, quien afirmó que tenía la necesidad personal de contar esta historia para afrontarla y su dolor fuera útil para alguien más. Fue un desahogo total. Mi idea era demostrar a la gente lo que pasa en el país dentro del sistema judicial. Tal vez no lo cambie, pero sí puede cuestionar cosas.

La vida de Miriam se volvió de dominio público luego que en 2007 fue arraigada junto a otras personas por el presunto delito de tráfico de indocumentados. De acuerdo con su relato, el abogado de oficio que le proporcionaron le dijo que ya sabía que eran inocentes, pero alguien había pagado para que otros terminaran presos. Así, Miriam fue recluida injustamente en una cárcel controlada por el crimen organizado, en Matamoros. 

Al final, esta película no busca señalar a los verdadero culpables, sino exorcizar los demonios de la protagonista y ayudar a limpiar su nombre, devolverle lo que el país le quitó, afirmó Nicolás Celis, productor de Tempestad.

El testimonio de Miriam se entrelaza con el de Adela Alvarado, quien busca a su hija desaparecida a la vez que trata de sanar su vida. Por su oficio de payaso, pasa de la risa al llanto. Por un momento se olvida del dolor para poder divertir a los niños del circo donde trabaja. 

Es importante destacar la forma narrativa del documental, en el que se hace una recreación a partir de las vivencias de Miriam y de Adela. Se ofrece al espectador un viaje del norte al sur de México, a través de imágenes mezcladas mientras se escuchan los relatos de ambas mujeres.

En tanto, Marc Abraham, productor de cintas como Niños del hombre, sostuvo un encuentro con estudiantes, ante quienes habló sobre el quehacer cinematográfico en Hollywood.

El también director, quien acudió al RMFF para presentar su filme Vi la luz, reconoció que hacer cine nunca es fácil y más cuando las opiniones son encontradas.