Una frase expresa el sentir de la comunidad de oaxaqueños en California respecto del gobierno de Gabino Cué Monteagudo: han sido seis años, dicen algunos de sus líderes, de decepción por las ofertas incumplidas.

En California viven entre 800 mil y un millón de oaxaqueños. Constituyen una comunidad influyente, no sólo por la aportación que hacen a sus familias en México por medio de las remesas, sino también por el liderazgo que ejercen en sus lugares de origen.

Ha sido más de lo mismo, o peor, dice Odilia Romero, una de las dirigentes del Frente Indígena de Organizaciones Binacionales (FIOB), cuando se refiere a la gestión del mandatario estatal. Recuerda la expectativa que entre la comunidad oaxaqueña de California despertó hace seis años el entonces candidato Cué, quien al frente de una alianza de tres partidos que reunió a izquierda y derecha hizo que por primera vez en ocho décadas el Partido Revolucionario Institucional (PRI) cediera la gubernatura del estado, el segundo más pobre del país.

Cué Monteagudo, quien dejará el cargo a finales de este año, buscó el apoyo de la comunidad oaxaqueña en California. Hizo campaña en ese estado.

En una conversación con la plataforma digital La Educación, que da seguimiento a temas educativos y comunitarios en California, Rufino Domínguez, también dirigente del FIOB, calificó hace seis años de una gran esperanza la llegada de Cué a la gubernatura.

Como migrante, esperamos que Cué se enfoque en proyectos económicos en comunidades con una fuerte expulsión de migrantes, para tratar de parar la migración, que ya no es una forma de cambiar de vida, sino sólo de sobrevivir, dijo Domínguez en esa plática. (Se puede ver en https://youtu.be/J_D3GeL3_R8)

A la vuelta de seis años, el ánimo de la parte representativa de la comunidad de oaxaqueños en California es diferente al que se despertó cuando llegó el primer gobernador que no postuló el PRI.

El gobierno de Gabino Cué ha demostrado no haber hecho un buen trabajo, afirma Luis López Reséndiz, coordinador juvenil del FIOB, en una entrevista la semana pasada.

La pobreza en Oaxaca aumentó, respecto de 2010, añade, en referencia a la información publicada por La Jornada el lunes pasado.

Tampoco hay satisfacción respecto de ofertas concretas que hizo Cué cuando visitó California para buscar el apoyo de los oaxaqueños residentes allá. Prometió infraestructura para comunidades indígenas y no cumplió, agrega López Reséndiz, quien realiza estudios en la Universidad en Berkeley.

Cuando Gabino (Cué) se postuló como candidato vimos que la gente creyó fuertemente que se podría hacer un cambio por la fuerza popular. El mensaje ahora es tener memoria, apunta.

El también dirigente comunitario Felipe López, en una entrevista la semana pasada, se refiere a las ofertas incumplidas del gobernador oaxaqueño. Dijo que iba a hacer una Casa de Oaxaca en Los Ángeles (California), para estar cerca de los migrantes y atenderlos. Se le propuso que atendiera a los estudiantes que salen a México para que se adaptaran a la comunidad oaxaqueña cuando son deportados, y nada. Le hice una propuesta para acercarse a los migrantes, me la firmó y se tomó la foto, pero no hizo nada. Se iba a establecer un mecanismo para apoyar a mujeres, especialmente a madres y esposas de migrantes que son abandonadas, y no cumplió, comenta en una conversación para este reporte, elaborada con la mediación de la plataforma La Educación.

José González, otro dirigente comunitario, formó parte de la red que apoyó a Cué hace seis años en California. No me arrepiento de haberlo hecho, dice ahora, “porque logramos demostrar que si nos decidimos a hacer un cambio, lo podemos lograr.

Es una vergüenza Gabino. No tiene principios. El pueblo oaxaqueño puso toda la esperanza por un cambio que llevara a estar mejor que con los gobiernos anteriores del PRI. Pero resultó peor este cambio, sintetiza González.