Londres.

La organización Amnistía Internacional (AI) denunció este martes que los periodistas del mundo han sido víctimas de acoso, amenazas e intimidación en un intento de amordazar la libre expresión, y en el Día Mundial de la Libertad de Prensa señaló a México como uno de los países en que más se persigue a los comunicadores, junto a Camerún, China y Turquía, entre otros.

Periodistas en todo el mundo son objeto de detenciones arbitrarias, prisión, tortura y otras formas de abuso. Están encarcelados, o incluso muertos, simplemente por hacer preguntas que inquietan a las autoridades, indicó Anna Neistat, directora de AI para la investigación.

AI destacó que son cientos de casos en todo el mundo; sin embargo, enumeró los de nueve periodistas que en estos momentos son los más notorios, por los que pidió una investigación transparente para llevar a los responsables ante la justicia y garantizar que el trabajo periodístico pueda hacerse sin temor a represalias.

Sobre México se menciona en el reporte el caso de la periodista mexicana Anabel Flores Salazar, asesinada en febrero de 2016 tras ser secuestrada en su casa por hombres armados. Estaba especializada en información sobre crímenes y trabajaba en un periódico local del estado de Veracruz.

Su muerte es un trágico recordatorio de la violenta realidad a la que se enfrentan miles de periodistas en México, uno de los países más peligrosos del mundo para los profesionales de los medios de comunicación. Veracruz es uno de los estados más peligrosos para los periodistas en México: desde 2010 han perdido la vida al menos 17 profesionales de los medios de comunicación, afirmó AI.

México es el único país de América Latina que aparece en el informe de AI en el apartado sobre persecución a periodistas, al lado de China, Tailandia, Azerbaiyán, Francia y Rusia.

Durante 2015 continuaron las amenazas, el acoso y los homicidios contra periodistas y defensores de derechos humanos en México. A pesar de la existencia del Mecanismo de Protección para Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas, aprobado en 2012, la falta de recursos y coordinación provocó que no se ofreciera la protección adecuada, sostiene AI.

En lo que va de 2016, ya han sido asesinados cuatro periodistas, apuntó el organismo.

El periodista maya Pedro Canché fue puesto en libertad a finales de mayo del año pasado, un día antes de cumplir nueve meses encarcelado en espera de juicio por cargos infundados de sabotaje, presentados contra él en represalia por ejercer pacíficamente su derecho a la libertad de expresión.

El reportero gráfico Rubén Espinosa Becerril, la activista Nadia Vera Pérez y tres mujeres más aparecieron sin vida en un departamento ubicado en la ciudad de México en julio de 2015. Tanto Rubén Espinosa como Nadia Vera habían abandonado el estado de Veracruz meses antes a causa de amenazas de muerte.

Además, otros periodistas continuaron sufriendo el hostigamiento de autoridades y algunos de ellos huyeron de sus lugares de residencia o abandonaron su trabajo por temor a las represalias.

El informe.

El secretario general de la Organización de Naciones Unidas, Ban Ki-moon, hizo énfasis en que las sociedades deben proteger el trabajo de los periodistas no sólo porque tienen derecho a estar informadas, sino para tener elementos para hacer rendir cuentas a gobiernos y autoridades.

Periodistas venezolanos marcharon en Caracas para exigir que se les provea de papel periódico y que se respete la libertad de prensa.

La Federación Colombiana de Periodistas denunció que en los cuatro primeros meses del año hubo 70 agresiones contra comunicadores en el país. El organismo detalló que hubo 26 casos de amenazas, 12 obstrucciones al trabajo periodístico y diez casos de campañas de desprestigio o estigmatización contra periodistas, entre otras agresiones.