Buenos Aires.

En medio de un conflicto social en ascenso, con aumentos insostenibles de tarifas, combustibles y alimentos continúan apareciendo nombres de altos funcionarios, que, como el mandatario Mauricio Macri, figuran en sociedades offshore en Los papeles de Panamá. La nueva revelación se refiere al secretario general de la presidencia, Fernando de Andreis.

Junto a De Andreis figuran su esposa, suegros y cuñados en varias sociedades offshore registradas por Mossack Fonseca en paraísos fiscales, informó el diario La Nación.

María Sol Ascónape, esposa de De Andreis, aparece junto a familiares con un amplio poder para manejar la firma offshore Parquemar Group, de Panamá, que funcionó hasta enero de 2014, dos meses antes de celebrarse el matrimonio. Se conoce que el padre y el hermano de María Sol Ascónape que están en la sociedad offshore, contribuyeron en diversas campañas de Mauricio Macri.

De Andreis fue el jefe de asesores de Marcos Peña en la legislatura porteña y presidente del ente de Turismo de esta ciudad cuando Macri era alcalde de Buenos Aires. Ahora es uno de los principales asesores del mandatario.

Al tratar de salir al paso, De Andreis dijo que no le correspondía entrometerse en las cuestiones privadas de mi suegro, e intentó evadir responsabilidades al argumentar que ni su esposa ni él sabían de la existencia de esas sociedades, ni que su padre había redactado un poder en favor de ella que tenía entonces 23 años.

Martín Ascónape, padre de María Sol, es un empresario inmobiliario relacionado con barrios privados que junto a otros socios figuran en una red de sociedades offshore que se controlan unas a las otras. Según Mossack Fonseca, es accionista en al menos otras dos firmas en paraísos fiscales.

Además, se vincula a Martín Ascónape con varias sociedades anónimas en Argentina, entre ellas, Chacras del Sur SA, que en 2013, fue allanada por la Agencia Federal de Impuestos Público por evasión impositiva, y por serias sospechas de ocultar operaciones por más de 7 millones de pesos.

Por lo pronto, el presidente Macri dijo este martes que está a disposición de la justicia para suministrar toda la información referida al caso de Los papeles de Panamá después que el juez federal Sebastián Casanello envió dos exhortos a Bahamas y a Panamá, donde se constituyeron dos de las empresas offshore donde figura el mandatario, para conocer su participación en las mismas.

La existencia de estas empresas, entre éstas Fleg Trading creada en las Islas Bahamas, fue revelada por la filtración a nivel global de documentos del despacho panameño de abogados, Mossack Fonseca, especialista en la creación de sociedades offshore.

La investigación de estos documentos, que comenzaron a ser divulgados a principios del mes pasado, estuvo a cargo del Consorcio Internacional de Periodismo de Investigación (ICIJ), que reunió a 376 periodistas para trabajar sobre 11.5 millones de documentos del bufete de abogados, que muestran sus operaciones entre 1977 y 2015.

En Fled Trading figuran en la presidencia y vicepresidencia Mauricio Macri, su padre Franco Macri, respectivamente, y su hermano Mariano Macri como secretario. La segunda empresa, Kagemusha, fue constituida en Panamá en 1981 y figuran Franco y Mauricio Macri y como secretario Gianfranco Macri, uno de los hermanos del gobernante y está vigente.

Ninguna de las dos figura en las declaraciones juradas de Macri cuando era jefe de gobierno de Buenos Aires o diputado, ni en la actualidad.

En el caso de Fleg Trading, Macri aseguró que se trató de una operación legal, está todo perfecto. No hay nada extraño. El mandatario, que aparece en unas 19 sociedades offshore y ha evadido explicar esta situación, dijo este martes en conferencia de prensa que le parece muy bien el envío de exhortos del juez Casanello a Panamá y Bahamas.

La acusación contra Fernández de Kirchner, un boomerang

Además de esta situación el tema de la compra de dólar a futuro vendido por el Banco Central en la gestión anterior y por lo que se intentó juzgar a la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner y otros funcionarios del gobierno del ahora opositor Frente para la Victoria, se convirtió en un boomerang para la administración macrista. En la lista de compradores figuran hombres claves del gobierno actual, que decidieron devaluar el peso en forma inmediata al asumir el 10 de diciembre pasado, de 9 a 15 dólares, permitiéndoles ganar millones de dólares que perdió el Estado argentino por esta maniobra.

La sombra de la corrupción ronda en el entorno gubernamental mientras se agudiza el conflicto social que puede estallar ya que en su mayoría el Frente Renovador, un opositor amigo del macrismo votará en favor de la ley anti despidos, por la emergencia ocupacional que Macri asegura que vetará.

En esta semana se presentarán varias denuncias contra el gobierno por haber mentido con respecto al aumento de tarifas, que en caso de la luz suma un mil 700 por ciento a empresas, que anuncian que no podrán funcionar y llevará a la quiebra de pequeñas fábricas y comercios, disparando el desempleo la inflación, cuando acaba de aumentar por tercera vez en cuatro meses la nafta (gasolina), que suma un incremento de 30 por ciento con este ajuste.

En horas se disparan los precios y suena a burla que el ministro de Energía y ex gerente de la Shell, Juan José Aranguren diga que si el consumidor considera que este nivel de precios es alto, que deje de consumir. Fue como echar leña, como sostienen dirigentes sindicales, quienes advierten que el ex gerente de Shell a la que ha favorecido con siete de ocho licitaciones aprobadas por su ministerio, sabe que el conductor de un autobus, un taxi, un camionero no puede decidir no consumir nafta sólo que pare en forma definitiva.