Para concertar una cita con Mercado, llegaron acompañadas de 300 granaderos
Demandan interlocución directa con el jefe de Gobierno, Miguel Ángel Mancera
Miércoles 4 de mayo de 2016, p. 29
Con un grupo de 300 granaderos, personal de concertación política de la Secretaría de Gobierno llegó el sábado pasado al plantón que mantienen integrantes de la Asamblea de los Pedregales de Coyoacán en la avenida Aztecas 215, en el pueblo de Los Reyes, en defensa de un venero que es secado para construir tres torres departamentales, para concertar una reunión entre los inconformes y la titular de la dependencia, Patricia Mercado.
Nos dijeron que venían de manera respetuosa, mientras se escuchaba la marcha de los uniformados que rodearon el campamento
, relataron en conferencia de prensa, en la que repudiaron el diálogo amenazante de las autoridades y exigieron una interlocución directa con el jefe de Gobierno capitalino, Miguel Ángel Mancera.
Jesús Ledezma, integrante de la asamblea, expresó que la comitiva enviada por la Secretaría de Gobierno no arribó con el ánimo de dialogar, sino de imponer. Al ver la situación de riesgo, sobre todo para las personas adultas mayores que están en el plantón, desocupamos un carril de la vialidad y acordamos un encuentro, que se realizó ayer, pero en el que sólo entregamos nuestra postura sobre el operativo
, apuntó.
Como asamblea general siempre nos hemos manifestado por un dialogo público con quienes puedan intervenir para la solución del problema, pero éste debe ser en las mejores condiciones y no con intimidación
, añadió.
Reiteró que es urgente que se detenga el daño ambiental que se ocasiona con el derrame de miles de litros de agua del yacimiento hídrico al drenaje, tras señalar que resulta insuficiente que la secretaria de Gobierno declare que es agua de mala calidad
. Que presente los estudios y que se realicen nuevos con especialistas e instituciones independientes
, reclamó.
Los integrantes de la asamblea indicaron que a raíz de la movilización del viernes pasado las autoridades acudieron a colocar sellos de suspensión en la obra, lo cual definieron como una estrategia para calmar los ánimos entre la población, pero sin resolver el problema de fondo.
Detallaron que a cuatro días de que se detuvieron los trabajos, una tercera parte del predio se encuentra ya inundado. Aseguraron que trabajadores que aún se encuentran en el interior están contaminando el agua.
Han intentado tapar el brote de agua con cascajo y máquinas revolvedoras que han vertido concreto fresco, pero no han podido frenarlo porque aflora en otros puntos
, dijo Daniel Sandoval, integrante de la asamblea, quien reiteró que el plantón no se levantará hasta que se cancele de manera definitiva la obra y se expropie el terreno por utilidad pública.