San Juan.

El Banco de Desarrollo del Gobierno (GDB por sus siglas en inglés) de Puerto Rico anunció este lunes que llegó a un acuerdo tentativo para la restructuración de la deuda con algunos de sus principales acreedores, apenas horas después de declarar que no pagará 422 millones de dólares por el vencimiento de un bono.

Me tocó elegir y elegí defender los servicios de la gente y atender el tema de la crisis fiscal de una vez y por todas, manifestó García Padilla en rueda de prensa.

Puerto Rico, desde 1952 Estado libre asociado a Estados Unidos, que lo mantiene bajo dominio colonial tras invadirlo en 1898, tiene una deuda pública que ronda los 70 mil millones de dólares y la liquidez del GDB es apenas de 562 millones de dólares, por lo que se encuentra prácticamente insolvente.

Cumplido el domingo el plazo de vencimiento de notas emitidas por el GDB por 422 millones de dólares, Puerto Rico dejó de pagar 367 millones de dólares a bonistas del Grupo Ad Hoc, mientras otros 22 millones corresponden a intereses que son negociados y 33 millones están relacionados a cooperativas locales que fueron objeto de un acuerdo por separado.

El mandatario puertorriqueño anticipó que el próximo 1º de julio la isla puede incurrir en un impago mayor, de cerca de 2 mil millones de dólares, de los cuales 774 millones corresponden a obligaciones generales, garantizadas por la Constitución.

No se anticipa que tengamos el dinero para pagar, advirtió, y aseveró que esto es sólo el comienzo si el Congreso estadunidense no adopta acciones pronto para resolver la situación.

Acompañado de su equipo económico, García Padilla confirmó que se logró una negociación por los 33 millones de dólares de las cooperativas puertorriqueñas mediante una nueva transacción que evitó el impago.