El papel de la danza como elemento de inclusión y transformación social, su función de coadyuvante para el desarrollo humano y su vínculo con otras disciplinas artísticas son los ejes de Pies para volar: coloquio de danza, infancia y juventud, que hoy concluye en el Centro Cultural del Bosque.

En ese encuentro participan reconocidos coreógrafos, bailarines, maestros, trabajadores sociales e investigadores que comparten experiencias y reflexiones en torno de la danza enfocada a los públicos infantil y juvenil, además de analizar las cualidades de esta disciplina para el desarrollo individual y social de esa población.

Organizado por VITARS Fomento Cultural, en colaboración con la Secretaría de Cultura del gobierno federal y el Instituto Nacional de Bellas Artes, ese foro se inscribe en los festejos por el Día Internacional de la Danza, que hoy se conmemora.

El coloquio está integrado por mesas de trabajo, cuatro obras dirigidas al público infantil y un taller familiar que este viernes se efectuará en el Centro Nacional de Investigación, Documentación e Información de la Danza José Limón (Cenidi Danza, Río Churubusco, esquina calzada de Tlalpan, colonia Country Club, estación General Anaya del Metro).

Arte dancístico para y con niños

En conferencia de prensa, efectuada hace unos días, el curador del coloquio, Héctor Garay, explicó que en las mesas se analizan el proceso creativo de danza para niños, las experiencias que al respecto han tenido diversas compañías y proyectos mexicanos, su uso terapéutico, la contribución en el desarrollo humano y la inclusión de nuevas tecnologías en esa disciplina.

Queremos que el niño no sólo sea un espectador al que traen una vez a un espectáculo, sino que regrese siendo adolescente y luego adulto; que se integre como público. También nos interesa que participe, que no sólo sea danza para niños, sino danza con niños, dijo Garay a propósito de los objetivos del encuentro.

El coreógrafo Saúl Maya, de la compañía Las Bestias, especializada en propuestas infantiles, destacó el importante papel de la danza. Quizá no ayuda a cambiar a una sociedad, pero sin duda contribuye a dar un grado de humanidad a los niños, los jóvenes y los adultos.

De acuerdo con el creador, la danza infantil en México es un territorio todavía poco atendido. Y aunque existen muchos grupos y proyectos dirigidos a niños, precisó, son insuficientes, pues la cantidad de pequeños es muy grande.

El coloquio se inauguró el pasado martes con la función de la obra Asteroide B-612, a cargo de la compañía Athosgarabathos, en el teatro de la Danza del Centro Cultural del Bosque.

Las otras coreografías que forman parte del programa artístico son El robot actuante, con la agrupación ASYC, Los marcianos llegaron ya!!!, montada por Las Bestias y Así somos... Somos danza, por la Asociación Mexicana de Danza Terapeútica.