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Esa propuesta lúdica complementa El futuro me pertenece, exposición montada en el Cenart

Los sueños de Tesla son aderezados por el mago Edrian en el Foro de las Artes

Fue considerado un lunático, pero hoy es el padre de la civilización eléctrica, dice el ilusionista

Foto
Edrian, mago e ilusionista, en una escena de Los sueños de Tesla, que presenta en el Centro Nacional de las ArtesFoto Jesús Villaseca
 
Periódico La Jornada
Miércoles 27 de abril de 2016, p. 4

Actos de ilusionismo, prestidigitación, hipnotismo, mentalismo, magia y contactos con el más allá son parte de la propuesta lúdica Los sueños de Tesla, que se presenta en el Foro de las Artes del Centro Nacional de las Artes (Cenart) como una de las actividades complementarias de la exposición El futuro me pertenece: Nikola Tesla.

Edrian, mago e ilusionista, al tiempo que realiza varios actos, cuenta al público algunos de los más importantes momentos del trabajo y la vida de Tesla, quien en su tiempo fue considerado un lunático, pero hoy es reconocido, por encima de Thomas Alva Edison, como un genio inventor, padre de la civilización eléctrica.

Murió solo en Nueva York

Nikola Tesla, nacido en Serbia, fue gran ingeniero eléctrico y mecánico, así como soñador irredento que creía en la capacidad de la mente humana y en la idea de que todo, absolutamente todo, es posible.

Sus ideas eran tan adelantadas a su época, que ahora se le podría considerar el padre de la tecnología moderna; sin embargo, murió solo y sin dinero en un hotel de Nueva York.

Antes de su deceso tuvo muchos momentos de triunfo y enorme satisfacción. Por ejemplo, creó lo que llamó la bobina Tesla, sostuvo una intensa rivalidad con Alva Edison, quien desarrolló la corriente directa, mientras Tesla perfeccionó la corriente alterna, la que hoy ilumina al mundo.

Entre las extraordinarias historias o leyendas que se cuentan, narra Edrian, está la de que “testigos afirman que la FBI entró a su habitación del hotel para desaparecer todos sus objetos personales, entre ellos varios documentos que después fueron clasificados como secretos por el gobierno de Estados Unidos.

Esos documentos se dice que fueron utilizados el 28 de octubre de 1943 por elementos de la Armada de ese país, para algo llamado el Proyecto Filadelfia o Proyecto Arcoíris, el cual consistía en crear la invisibilidad de objetos a partir del uso de campos magnéticos y eléctricos, desarrollados por el mismísimo Nikola Tesla. Sin embargo, no conformes con eso, se habla de un segundo experimento que implicaba la teletransportación. ¿Mito o realidad?

Historias extrañas y datos curiosos sobre el excéntrico personaje que fue Tesla, quien durante su carrera registró más de 700 patentes, se encadenan con actos de mentalismo, ilusionismo y prestidigitación.

El futuro me pertenece llegó a expresar tan extraordinario y apasionado hombre, que tenía un objetivo muy claro: el dominio total de la mente sobre el mundo material y el aprovechamiento de las fuerzas de la naturaleza en favor de las necesidades humanas.

Con dirección de Patsy Evith Sánchez García, Los sueños de Tesla se presenta miércoles y jueves, a las 20 horas, en el Foro de las Artes del Cenart (Río Churubusco, esquina calzada de Tlapan, colonia Country Club). El 5 de mayo no habrá función.