El conteo regresivo de 100 días hacia el inicio de los Juegos Olímpicos de Río 2016 comenzará el miércoles 27 de abril en México con una ceremonia en el Comité Olímpico Mexicano y la iluminación de edificios.

En principio, en el estadio Olímpico Universitario con las banderas mexicana y verdeamarela, como parte de las actividades de promoción en los países con los que Brasil sostiene relaciones diplomáticas.

Lucas Frota, secretario en el cuerpo diplomático de la embajada brasileña en nuestro país, aseguró que a pesar de la crisis política que enfrentan, que es interna, y los conflictos económicos en la construcción de obras para la justa, los juegos saldrán adelante con éxito.

El estadio se iluminará con los colores de Brasil y México porque nosotros somos las dos naciones olímpicas de Latinoamérica: primero México en 1968 y ahora Río en 2016. Es un hecho que aproxima a las dos naciones, dijo Frota, asignado por el embajador Enio Cordeiro a las actividades relacionadas con el certamen, que se inicia el 5 de agosto con la inauguración en el estadio Maracaná.

Dijo que además de iluminar el estadio de CU, planean hacer lo mismo en la sede del Senado de la República, aunque aún no está confirmado, mientras en las pantallas del Aeropuerto de la Ciudad de México habrá un conteo regresivo e información sobre los juegos, los primeros en Sudamérica.

El pasado jueves, durante el encendido de la antorcha olímpica en Grecia, el presidente del Comité Olímpico Internacional, Thomas Bach, manifestó que la justa será un mensaje de esperanza en tiempos difíciles y que pese a las dificultades por las que pasa Brasil, la llama es un recordatorio eterno de que todos somos parte de la misma humanidad.

La presidenta brasileña, Dilma Rousseff, enfrenta un posible juicio político antes de la cita deportiva, acusada de manipulaciones financieras con el presupuesto federal.

El diplomático aseguró que a pesar de la crisis política en Brasil, la vida sigue. Los juegos serán un éxito, hay una planeación de siete años.

Mencionó que tras la inspección que realizó el COI hace dos semanas, concluyó que 98 por ciento de la estructura para los juegos está lista.

Es una década muy importante para el deporte en Brasil, dijo, al recordar que fue sede del Mundial de futbol en 2014 y en los recientes dos años de los juegos mundiales Indígenas y del Ejército.

Para los olímpicos, mencionó: Se invirtió mucho dinero y trabajo humano, y sobre la preparación de Río 2016, precisó que se habrán ocupado 85 mil obreros del sector privado, 8 mil funcionarios del gobierno y 35 mil integrantes del comité organizador, además de 35 mil servidores públicos y militares , aparte de que se suscribieron 45 mil voluntarios.

Las autoridades brasileñas han asegurado que se libraron los conflictos económicos, sobre todo por la conclusión de las obras.

Preocupación siempre hay, pero nosotros creemos que este año la evolución fue buena y esperamos que, como sucedió en Barcelona (1992), lo importante es que haya un legado para la población, que después se queda en Río, dijo, y recordó que además se amplió el sistema del metro, la red de autopistas y se renovó el centro histórico de Río de Janeiro.

No obstante, admitió que las calamidades no cesan en torno a la organización, pues el jueves fallecieron dos personas a causa del derrumbe de un sector de una ciclovía elevada en Río, construida como parte de la infraestructura de la sede olímpica, inaugurada en enero pasado.

Es una tragedia, hay que investigar lo que pasó, pero creo que los juegos serán un éxito, puntualizó el diplomático.