Ginebra.

Alrededor de 60 de los 67 millones de trabajadores domésticos del mundo no disponen de seguridad social, informó hoy en Ginebra la Organización Internacional del Trabajo (OIT).

Las personas que limpian, cocinan, cuidan a los hijos de otras personas o atienden a personas de edad avanzada suponen cuatro por ciento de la fuerza del trabajo del mundo. La mayoría, 80 por ciento, son mujeres.

Cuando los trabajadores domésticos envejecen o se lesionan son despedidos sin ninguna pensión o soporte financiero adecuado, afirmó Isabel Ortiz, directora del Departamento de Protección Social de la OIT.

Naciones en desarrollo

Los países en desarrollo tienen las mayores brechas en la cobertura de la seguridad social para el trabajo doméstico, afirma el informe de la agrupación.

Solo una cuarta parte de los países africanos ofrecen protección social a ese sector. Una quinta parte de los países de Oriente Medio y Asia brindan seguridad social, mientras en América Latina sólo 60 por ciento de naciones.

La OIT aseguró que hay una tendencia clara entre los países en desarrollo a aumentar ese tipo de coberturas.

A pesar de que en Estados Unidos y Europa occidental hay algún tipo de protección, la OIT identifica varios problemas en las regiones.

En Italia, 60 por ciento de trabajadores domésticos no están dados de alta en el sistema de seguridad social o no contribuyen con él.

El 30 por ciento de los trabajadores domésticos de España y Francia también están excluidos de la cobertura sanitaria, asegura el informe.