La Comisión Nacional de Áreas Protegidas (Conanp) afirmó que está trabajando en una estrategia de fortalecimiento del Centro Mexicano de la Tortuga que se encuentra en Mazunte, Oaxaca –que anualmente recibe a más de 40 mil visitantes de México y el mundo–, la cual comprende la identificación de diferentes fuentes de financiamiento que permitirá continuar con los avances de su remodelación.

Si bien en los últimos años se han invertido más de 40 millones de pesos en el centro, esta estrategia permitirá consolidar su fortalecimiento durante la presente administración, subrayó.

El martes, La Jornada publicó testimonios de trabajadores que señalaron falta de inversión y vigilancia, así como el deterioro e insalubridad del lugar. También revelaron que entre 2014 y 2015 al menos 33 tortugas murieron por la falta de atención eficiente, ya que permanecían en estanques sucios y se les alimentaba únicamente con calamar, cuando son animales que requieren una dieta balanceada.

Al respecto la Conanp señaló en un comunicado que como parte del proceso, en septiembre del año pasado designó a Érika García Campos, egresada de la Escuela Nacional de Ciencias Biológicas del Instituto Politécnico Nacional (IPN) con destacada experiencia en la conservación de estas especies, como nueva coordinadora del centro.

La dependencia apuntó que el Centro Mexicano de la Tortuga fue creado en 1991 y tiene como propósito principal el difundir información sobre la importancia de las tortugas marinas y las acciones de conservación realizadas en México.

Además, dijo, cumple una destacada función para el seguimiento, rehabilitación y liberación de ejemplares de las tortugas marinas golfina, prieta y laúd.

“En las playas de anidación que opera el centro se liberan cada año más de 30 millones de crías de tortuga golfina, lo que representa cerca de 90 por ciento del total de crías que se protegen anualmente en México.

Constituye un destacado espacio de generación e intercambio de información científica. En noviembre de 2015 fue sede del 22 Congreso Nacional de Zoología, con la participación de investigadores de talla internacional y una asistencia récord de más de 600 actores claves de la conservación.

Agregó que seis de las siete especies de tortugas marinas habitan en las aguas del territorio nacional y que en 1990 México decretó protección absoluta para estas seis especies, lo que ha representado un caso de éxito con relevancia mundial en los esfuerzos de recuperación de varias de las tortugas marinas.