Actividad industrial, inversión y confianza empresarial han caído en el país en los pasados meses pero en mayor medida en los estados cuya economía está ligada al sector petrolero, como Campeche, Tabasco y Veracruz, advirtió el Centro de Investigación en Economía y Negocios (CIEN) del Tecnológico de Monterrey.

En cinco de las siete entidades que, en conjunto, aportan 51 por ciento del producto interno bruto (PIB) industrial se registran caídas en las actividades secundarias. El grupo lo encabeza Campeche, cuya contribución es de 11.4 por ciento al PIB industrial, seguido del estado de México (8.3 por ciento), Nuevo León (8.2 por ciento), Tabasco (6.5 por ciento), Veracruz (5.8 por ciento), Jalisco (5.6 por ciento y el Distrito Federal, hoy Ciudad de México (5.2 por ciento).

La tendencia a la baja en el valor de los hidrocarburos se ha mantenido prácticamente desde octubre hasta nuestros días, de tal forma que las entidades de nuestro país que se encuentran estrechamente ligadas con las actividades petroleras comienzan a mostrar desempeños negativos, particularmente en su actividad industrial, destacó el CIEN en su análisis semanal Las consecuencias del petróleo barato.

En octubre de 2015 la actividad industrial fue negativa en 11 estados, es decir, casi la tercera parte del país y de los siete que aportan la mitad del PIB industrial nacional sólo Nuevo León y Jalisco presentaron cifras positivas.

Michoacán tuvo el mayor retroceso, de 10 por ciento, y aunque en segundo lugar se ubicó Campeche, estado eminentemente petrolero, cuya caída fue de 9.7 por ciento, el CIEN destacó que su caso cobra relevancia porque cuenta con la mayor participación en la actividad industrial nacional, de alrededor de 11.4 por ciento.

También Veracruz, con importante actividad petrolera y aportación a la industria nacional de 5.8 por ciento, tuvo una caída de 2.6 por ciento, agregó. Tabasco aporta 6.5 por ciento del PIB industrial nacional y en octubre sólo aumentó 0.2 por ciento.

Los precios internacionales de hidrocarburos han impactado directamente en el accionar de las entidades que dependen de dicho bien, no obstante, los efectos permean en el resto de la economía, apuntó. Así que Campeche y Veracruz muestran una tendencia a la baja mientras que Tabasco presenta señales de estancamiento, ponderó.

Alertó que el anuncio del gobierno federal de una nueva reducción en el gasto corriente podría afectar los niveles de inversión y, en consecuencia, el crecimiento económico, sobre todo cuando la inversión fija bruta ya muestra tendencia a la baja y en noviembre registró una tasa anual negativa de 0.4 por ciento, que no podrá revertirse en el corto plazo.

A ello se agregó el deterioro que muestra la inversión y confianza empresarial, agregó el estudio.