Washington.

La Reserva Federal (Fed) dijo que el crecimiento de la economía estadunidense se hizo más lento a fines de 2015 y agregó que la estimación permanecerá baja a corto plazo, debido a la caída de los precios de la energía.

Cauteloso por las debilidades económicas mundiales, el banco central mantuvo sin cambios las tasas de interés en un rango de entre 0.25 y 0.50 por ciento, nivel al que fueron incrementadas en diciembre. Hasta entonces estuvieron entre 0.25 y 0.50 por ciento, durante siete años, con el propósito de ayudar a sacar a la mayor economía del mundo de la recesión de 2008 y 2009.

El banco central estadunidense señaló que está monitoreando de cerca los acontecimientos financieros y económicos mundiales. La decisión del banco central era ampliamente esperada, después de que una caída en los mercados bursátiles mundiales levantó la preocupación de que una desaceleración global abrupta podría afectar el crecimiento económico estadunidense.

En diciembre la Fed subió su tasa clave de interés en un cuarto de punto porcentual, en una señal de que la economía avanzaba en su recuperación tras la crisis financiera, y marchaba sin ser afectada por la debilidad económica de China, Europa y Japón.

Cae la confianza

Tras la primera reunión de su Comité de Política Monetaria en este año, el banco central mostró menos confianza que hace un mes en cuanto al futuro de la inflación y el crecimiento, aun cuando advirtió mejoras en el empleo y en el sector de viviendas.

El aumento de diciembre fue resuelto tras haberse consolidado la mejora del empleo y en la razonable confianza de que la inflación se orientaría hacia la meta de 2 por ciento, se dijo entonces.

En el comunicado de este miércoles, la Fed quitó la expresión razonable confianza e hizo referencia a que parte de la volatilidad de los mercados se debe a sus planes de aplicar una política monetaria menos expansiva.

Empero, los miembros del Comité de Política Monetaria dijeron que aún esperan que la inflación, debilitada por el derrumbe del petróleo, podrá encaminarse a mediano plazo hacia el objetivo de 2 por ciento considerado bueno para Estados Unidos.

La información recibida desde la reunión del Comité de Política Monetaria de diciembre indica que las condiciones del mercado de trabajo mejoraron más, aun cuando el crecimiento se enlenteció a finales del año pasado, dice el comunicado.