Presentan En el bazar de los prodigios en Bellas Artes
Jueves 28 de enero de 2016, p. 6
La dedicatoria Cien años de ALEGRIA para mi gran amigo José Luis Calzada, con un apretón de manos, Gabriel García Márquez
, es un recuerdo que con orgullo el pintor y grabador duranguense comparte con el lector de En el bazar de los prodigios, libro antológico de medio siglo de oficio, que se presentará el miércoles 27 en la sala Ponce del Palacio de Bellas Artes.
Dueño de un estilo figurativo, agradable, fácil de entender, Calzada se lo atribuye a su lectura en 1970 de la primera edición de Cien años de soledad: me identifiqué mucho porque soy de origen campesino y el libro transcurre en el ámbito rural. Hice una serie de grabados de la novela porque quería que las personas se dieran cuenta de que tenían que ver con un personaje de la novela
. También ha ilustrado la obra de otros escritores porque le gusta que un poema provoque un dibujo, una pintura o viceversa
.
Una de las múltiples salidas que Calzada ha tenido para su obra ha sido el Jardín del Arte San Jacinto. No faltaron los grabados enmarcados alusivos al libro del premio Nobel de Literatura. Entrevistado, recuerda como año y medio antes de su fallecimiento, García Márquez pasó en su coche con su chofer y vio el grabado Macondo, preguntó quién era el autor, entonces Calzada se presentó con él.
“Le conté cómo me había inspirado en la novela, le regalé el grabado y se emocionó. A los 15 días regresó a darme las gracias y decirme que ya lo había colgado en su estudio. Le regalé otro que también tenía que ver con su obra. En una nueva visita le obsequié un tercer grabado. La cuarta vez llegó el chofer y me preguntó si iba a estar allí porque el señor Gabriel me quería llevar algo. Llegó con la última edición de Cien años de soledad”, la cual en seguida le dedicó.
La obra de Calzada cuece aparte de las corrientes artísticas de las pasadas tres o cuatro décadas. “Siempre estuve en contra del arte vip (video, instalación y performance), que ha sido muy cuestionado últimamente. Desde mucho antes supe que no iba la cosa por allí y preferí mantenerme fiel a manejar bien el dibujo, la figura, las herramientas que han tenido el artista desde siempre. Qué curioso, ahorita está muy cuestionado el arte conceptual y los artistas vemos de nuevo el domino del dibujo, la perspectiva, la anatomía”, asegura.
El entrevistado empezó de pintor, sin embargo, su trabajo de ilustrador ha tenido que ver con su pasión por la literatura y la poesía. También ha cultivado el grabado –aguafuerte, xilografía, grabado en linoleum– porque se dio cuenta de que a través de este medio uno podía llegar a más personas porque de una placa sale un tiraje. Igualmente, ha incursionado en la gráfica digital, incluso en el libro hay un apartado dedicado a su trabajo en este sentido. Apunta que curiosamente se empieza a valorar más el grabado tradicional.
Actualmente, está por mudarse a Cuernavaca donde piensa poner un taller de grabado para desarrollar otras ideas nuevas
.
José Luis Calzada. En el bazar de los prodigios será presentado a las 19 horas por el escritor Evodio Escalante, el poeta José Ángel Leyva, editor del volumen, y Jorge Herrera, hijo de fallecido político, Jorge Herrera Delgado, quien se encargó de conseguir los recursos para publicar el libro.