Entre rituales y símbolos, los rasgos contemporáneos de la cultura precolombina de Colombia y otras regiones de América Latina se ven reflejados a través del street art en la exposición Origo, de la artista visual Nathalia Gallego Sánchez, Gleo, la cual se inaugura este jueves en la galería Gurú.

Gallego, originaria de Cali, Colombia, explica en entrevista para La Jornada que la muestra “es una exploración intuitiva derivada de varias investigaciones antropológicas y artísticas sobre estas culturas. Mi intención es visualizar a los indígenas contemporáneos que descienden de estas grandes civilizaciones y no son valorados por la sociedad actual.

“Así –continúa– entendemos cómo hemos evolucionado socioculturalmente desde nuestros antepasados: ahora somos parte de una cultura popular muy compleja y vasta. Gracias a ellos comprendemos por qué de los dioses, rituales, colores o hasta celebraciones. Por ejemplo, entiendes por qué el Día de Muertos existe en México y no en otros países.”

Concreta: “Origo es una contrapropuesta, es una resistencia de todas la invasiones que hemos tenido en América Latina. Es rescatar todo el origen de esa cosmogonía y ver cómo somos actualmente, a pesar de los preceptos de occidentalización”.

Como ensamble, la muralista utilizó retratos de niños desplazados por el conflicto guerrillero, que viven en poblaciones indígenas remotas de Colombia, como Cauca, tomados por el fotógrafo bogotano Camilo Ara, al considerar que la fisionomía entre los latinoamericanos es similar.

In Lumen se titula esta obra de Nathalia Gallego y refleja el rencuentro de las raíces de las culturas precolombinas de América Latina como símbolo de la iluminación. Para la pieza se utilizó la fotografía de una niña colombiana de la comunidad indígena de EmberáFoto cortesía Raúl Arias

Al ser una artista que destaca en el mundo del street art latinoamericano, a sus 24 años de edad, Gleo, como es mejor conocida en las calles, revela que el salto de las muros al caballete fue un reto:

“Estoy acostumbrada a pintar en grandes formatos y son puras manchas y manchas de pintura a las que das forma. Pero aquí, sobre el lienzo, uno debe tener paciencia y hasta aguantar la respiración para hacer un trazo.

Pintar en la calle te hace reflexionar sobre el arte. Creas tu obra pero no es tuya, es de la ciudad, y ella sabe si la apropia o la desecha. Y lo mismo sucede con el mercado de este movimiento cultural, critica.

La muestra se compone por 16 obras, entre lienzos, objetos intervenidos y una escultura. Su primera exposición cerrada la realizó en la galería Paraíso, en Lima, Perú, donde presentó 24 piezas bajo el mismo concepto.

Sus más recientes trabajos de gran formato en México los realizó en las calles de San Miguel de Allende y Querétaro, para los festivales Muros en Blanco y Board Dripper, respectivamente. En la colonia Roma, de la ciudad de México, intervino el Ovnibus Roma, un camión que está confinado específicamente para ser intervenido por muralistas de arte urbano.

Actualmente prepara para febrero sus colaboraciones en Bélgica, Francia, España y Portugal, con el apoyo de la plataforma Muro, un proyecto dedicado a la vinculación del arte urbano de América Latina y Europa, y el estudio de diseño Cayab.

Origo se presentará hasta el 14 de febrero en la galería Gurú, en Londres 37, colonia Juárez.