San Cristóbal de Las Casas, Chis.

Cientos de indígenas choles marcharon ayer en el municipio de Tila para exigir que se aclare la desaparición, tortura y asesinato de Toni Reynaldo Gutiérrez López, en julio pasado. Los delitos se atribuyen a policías de ese municipio del norte de Chiapas, informó el Comité de Derechos Humanos de Base de Chiapas Digna Ochoa.

En un comunicado, el organismo explicó que la marcha empezó a las 9 horas en la comunidad Nueva Esperanza, para seguir exigiendo justicia y la desarticulación de los grupos paramilitares cercanos al Partido Verde Ecologista de México (PVEM, que gobierna Tila).

A pesar de las provocaciones de sujetos identificados como integrantes de grupos paramilitares del PVEM en Nueva Esperanza, quienes han amenazado de muerte a Magali del Carmen Cruz Pérez (esposa de Toni Reynaldo) y a mujeres y ejidatarios pertenecientes a la organización Laklumal Ixim-Norte Selva, continuaremos nuestra lucha pacífica por justicia, por la defensa de nuestros derechos y por el territorio.

La organización no gubernamental consideró que la Procuraduría General de Justicia del Estado ha actuado de forma negligente, con dolo, y seis meses después de los hechos no ha corregido sus graves e intencionales errores ni ha fincado cargos por los delitos de desaparición forzada, tortura, detención arbitraria y los que resulten en contra de los policías detenidos.