Las iniciativas de ley del presidente Enrique Peña Nieto contra la desaparición y la tortura no serán legítimas si ni siquiera se conocen las verdaderas necesidades de los familiares de las víctimas, señaló Grace Fernández Morán, de las Fuerzas Unidas por Nuestros Desaparecidos en Coahuila y parte del Movimiento por Nuestros Desaparecidos en México.

En entrevista lamentó que para la elaboración de las propuestas no se les tomara en cuenta. “No nada más nos ignoran, sino que a los (familiares de) más de 26 mil desaparecidos en el país tratan de mantenernos en la sombra, cuando la participación ciudadana es un derecho en una democracia.

Estamos hasta el copete de las mentiras y falta de seriedad en el trabajo de todo el órgano de gobierno, subrayó.

Fernández Morán, cuyo hermano Dan Jeremeel se encuentra desaparecido desde el 19 de diciembre de 2008, resaltó que el Presidente “no nos ha querido recibir y (el secretario de Gobernación, Miguel Ángel) Osorio Chong tiene más de dos años que tampoco. Recién que entró lo hizo y jamás nos volvió a dar la cara.

Nos manda decir una cosa con (el subsecretario de Derechos Humanos, Roberto) Campa, y hace otra en público. A final de cuentas, igual que los compañeros de Ayotzinapa, no tenemos un resultado, destacó.

Dijo que no hay una real búsqueda de sus familiares, y lamentó que el Presidente entregue una iniciativa con el reloj encima para cumplir el plazo que le dio el comité de la ONU, pero eso no quiere decir que vaya a salir algo de provecho para las familias.

Grace Fernández señaló que no tener acceso a la iniciativa presidencial da cuenta de que no se les consideró, a pesar de que en diversas reuniones lo plantearon a Campa. En un principio nos habían prometido que sí se nos iba a considerar, pero lo único que hicieron fue lanzar una convocatoria en el portal de la Secretaría de Gobernación al público en general, por un periodo muy corto, y realmente la participación de las familias de las víctimas quedó fuera.

Insistió en que ese hecho no los daña solamente a ellos, sino al país en general, porque aunque nosotros no somos abogados ni expertos en leyes, sí tenemos la experiencia de saber qué hace falta en este país y qué no funciona para tener acceso a los derechos, a la verdad, a la justicia y, sobre todo, a la búsqueda de nuestros familiares.

Si se llegase a aprobar como está, dijo, no va a ser legítima, porque no puedes crear una ley cuando ni siquiera sabes quién va a resultar beneficiado o, sobre todo, perjudicado por la misma.

Afirmó que no hay reconocimiento real del problema, y puso por ejemplo que las cifras de víctimas no concuerdan ni en diferentes áreas de la Procuraduría General de la República. Y tratándose de los gobiernos federal y estatales, estamos hablando de muchísimos números y todo (es) diferente, añadió.

El común denominador que tenemos los más de 26 mil desaparecidos con los 43 de Ayotzinapa es que a todos nos simulan que están haciendo el trabajo, subrayó.